El soborno, la extorsión y el cohecho están tan arraigados en México que dejar de ser el país más corrupto entre las naciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) llevará hasta 40 años, reveló el estudio México: Anatomía de la corrupción, una investigación de la analista María Amparo Casar.
“La situación no es alentadora para México ni cuando se le compara con países miembros de organismos internacionales a los que pertenece ni tampoco cuando se le compara con países de características similares. México es percibido como el país más corrupto de la OCDE.
“De 1995 a 2014 México incrementó en cuatro puntos su Índice de Percepción de Corrupción (IPC); si esta tendencia se mantuviera y aun cuando el resto de los países permanecieran estáticos, a México le tomaría aproximadamente 40 años dejar el último lugar de entre los de la OCDE”, señala el documento.
El estudio refiere que México tenía un IPC de 31 puntos (donde 0 equivale a mucha corrupción y 100 ausencia de corrupción) en 1995; veinte años después, en 2014, nuestro país obtuvo una calificación de 35.
Pese a ello, la investigación sostiene que “enfrentar un problema como la corrupción no es nada fácil, pero es posible. Lo muestran las mediciones de organismos internacionales públicos y privados que han registrado y documentado los avances de las naciones en distintas áreas”.
Partidos políticos, en el fondo
De acuerdo con la investigación de María Amparo Casar, en todos los estados de la República, más del 65 por ciento de la población percibe corrupción en el sector público, siendo los partidos políticos los que son percibidos como los más corruptos.
Al presentar el estudio, Casar consideró que la corrupción en nuestro país ha generado en las últimas décadas una gran cantidad de costos económicos, políticos y sociales. El gobierno siempre presume que aporta toda la información para conocer el impacto de la corrupción, pero es muy difícil compilar datos específicos, lo que dificulta conocer su impacto”, expuso.
Las instituciones que se perciben como más corruptas son los partidos políticos (91%), la policía (90%), los funcionarios públicos, el Poder Legislativo (83%) y el Poder Judicial (80%).
Según la columnista de Excélsior, para erradicar la corrupción es imperativo localizarla, medir su extensión, identificar sus causas, encontrar las áreas de riesgo que permiten su reproducción, examinar sus mecanismos de operación, exhibir sus efectos y estudiar las experiencias exitosas en su combate.
“La corrupción es un lastre por los enormes costos económicos, políticos y sociales que ocasiona en los países que la padecen con mayor agudeza. Identificar y cuantificar dichos costos es indispensable para conocer la dimensión del problema y diseñar políticas públicas adecuadas para su prevención y erradicación”, expuso.
El documento señala que sólo el dos por ciento de los delitos por corrupción son castigados y siempre los cometidos por mandos inferiores. Además, de las 444 denuncias presentadas por la Auditoría Superior de la Federación desde 1998 hasta 2012, sólo 7 fueron consignadas, es decir, 1.5 puntos porcentuales.
“Ningún estado se escapa de la corrupción, en todas las entidades se percibe corrupción en el sector público. En Querétaro, el estado mejor calificado, el 65% de las personas cree que existe corrupción. El promedio de las 32 entidades fue de 85% de percepción”.
Ante esto, María Amparo Casar señaló que es necesario que a nivel federal se realice un acompañamiento de la Sociedad Civil en la redacción de leyes secundarias para el combate a la corrupción, que se homologuen los códigos penales para este tipo de delitos, que a nivel municipal se utilicen herramientas digitales para reducir discrecionalidad y trámites en ventanilla y además se prohíba el uso de dinero en efectivo en actividades gubernamentales.
“Hay maridaje muy mexicano entre corrupción e impunidad”
El cuerpo político, económico y social del país está invadido por la corrupción que le cuesta al país 65 mil millones de dólares anualmente; esta cifra equivale al cinco por ciento del Producto Interno Bruto, señaló María Amparo Casar, directora Anticorrupción del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
Entrevistada por Pascal Beltrán del Río, para Grupo Imagen Multimedia, al hablar sobre el reporte México: anatomía de la corrupción, dijo que por su economía, México debería estar en los primeros lugares sin corrupción, en cambio ocupa el puesto 103 de 175 países.
El estudio presentado por el Instituto Mexicano para la Competitividad y el Centro de Investigación y Docencia Económicas “es una fotografía de cómo nos vemos los mexicanos a nosotros mismos y cómo nos perciben y califican en el mundo en materia de corrupción”, señaló.
Dijo que el estudio muestra entre otros datos “que de 1996 al 2014 la palabra corrupción pasó de 500 menciones a 30 mil, sólo en los medios de comunicación”.
“Estamos en una etapa en la que todos hemos caído en la tolerancia social y tolerancia de las autoridades sobre la corrupción, hay un maridaje entre corrupción e impunidad, fenómeno que no es exclusivo pero si muy mexicano”, sentenció.
“En México no se llega ni a una veintena de políticos detenidos por corrupción. Sí hacemos un contraste con Estados Unidos, en México del 2008 a 2014, se denunció o exhibió a 46 gobernadores en actos de corrupción pero no se siguió la investigación; se encarceló a cuatro pero ya salieron dos; en el mismo lapso, en Estados Unidos se exhibió a nueve, se acusó a nueve y se procesaron a los mismos nueve”.
Aunque reconoció que hay una estrecha relación entre la pobreza de un país y su nivel de corrupción, dijo que “no es una regla, Uruguay y Chile son casos exitosos, a diferencia de México ya que han decrecido en temas de corrupción y son menos corruptos, en cambio México ha caído 31 lugares en el índice de Transparencia, pero su caída no sólo se debe a la medición, sino que se también debe considerar que otros países fueron agregados al listado”.
“El problema con México es que no importa con qué bloque o región nos veamos, en todos aparecemos al final de la cola y lo que es más preocupante es que tenemos un PIB que debería permitirnos estar en los 30 primeros lugares de países menos corruptos siendo la economía 14 en el mundo, en cambio ocupamos el lugar 103 de 175 países analizados”.
“La corrupción genera pérdidas, cuyos índices son diversos, hay organizaciones, que dicen que perdemos desde el 2% del PIB, hasta el Banco de México que dice que perdemos el 9%, la media sería el 5% del Producto Interno Bruto, lo que representa 65 mil millones de dólares, esto es más de lo que incluso una reforma fiscal exitosa puede aspirar”, expuso.
Fuente: http://www.excelsior.com.mx/nacional/2015/05/21/1025291
Dependiendo de la dosis recomendada, 1 sobre kamagra 100 mg es suficiente para 1-4 usos.