La declaratoria de Emergencia Sanitaria por el COVID-19 con la que se endurecen las medidas para controlar la propagación del virus en el país, así como la extensión de la Jornada Nacional de Sana Distancia hasta el 30 de abril y la suspensión de todas las actividades no esenciales, entre otras, podrían incrementar casos de estrés, ansiedad y depresión, incluso en quienes no tienen predisposición a estos trastornos, señaló el Dr. Óscar Galicia, coordinador de la Licenciatura en Psicología de la IBERO |
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