El COVID-19 llegó a México. Las fábricas están cerradas, los aviones, sin volar y las playas, vacías. Unas dos mil personas ya se han contagiado y docenas han muerto; los casos se duplican cada ciertos días. Durante semanas, el presidente Andrés Manuel López Obrador ignoró despreocupadamente las lecciones provenientes de Italia, España y otros lugares. Realizó concentraciones, abrazó a sus partidarios, besó a niños y se burló de las recomendaciones de seguridad |
Servicios