En la entidad poblana, durante el periodo vacacional el 62 por ciento de los niños menores de cinco años son propensos a sufrir un accidente, siendo los accidentes más comunes quemaduras, contusiones, fracciones e incluso ingerir productos de limpieza.
Lo anterior lo reveló María del Pilar Castro Fernández de Lara, directora de la Facultad de Enfermería de la Upaep, quien en conferencia de prensa expresó que del porcentaje de menores que sufren algún accidente solo el 39 por ciento recibe atención médica durante la primera hora del suceso.
Castro Fernández comentó que es importante que los menores que sufren algún tipo de situaciones, sean atendidos de manera inmediata, debido a que muchas lesiones pueden agravarse con forme pasen los minutos sin ser atendidos, por lo cual es vital acudir al médico más cercano.
Resaltó que dentro de los accidentes más comunes se encuentran las caídas de escaleras, azoteas o a nivel de piso, la ingesta de productos de limpieza como la sosa caustica o cloro, electrocuciones por falta de protección en los enchufes, quemaduras y asfixia por introducirse piezas pequeñas y bolsas de plásticos.
Por su parte, Irma Moreno Díaz profesora de la Facultad de Enfermería, resaltó que en muchos de los casos no saben qué hacer y llaman a los amigos o comadres, en lugar de acudir directo al médico, situación que agrava las situación del menor.
Recomendó revisar las instalaciones del hogar antes de dejar a los pequeños solos o en compañía de otras personas, debido a que en muchos de los casos pese a la vigilancia, son los pequeños descuidos de las cosas los que propician estos accidentes, como el no cerrar lugares que contienen cosas peligrosas o no proteger los enchufes.