Nunca es demasiado tarde para dejar de fumar, dice repetidamente la Organización Mundial de la Salud.
Y es que el tabaco en cualquiera de sus formas es letal y pone en peligro la salud pulmonar de todas las personas expuestas a él, fumen o no.
Unas 56,9 millones de personas mueren al año por todas las causas en el mundo y 8 millones de ellas fallecen por el tabaco. Mientras que un millón de muertes anuales se deben a la exposición al humo del tabaco, según la OMS.
Es decir que, según los cálculos, el tabaco mata a una persona cada 4 segundos.
Fumar cigarrillos es la forma más habitual de consumir tabaco, pero hay otros productos como bidis (cigarrillo delgado), kreteks (una mezcla de hojas de tabaco), puros y puritos, varios productos de tabaco sin humo, tabaco de liar, tabaco para pipa y pipa de agua, entre otros, que también son peligrosos.
Por eso abandonar el tabaco es crucial para reducir significativamente el riesgo de contraer muchas enfermedades cardiovasculares, cánceres y afecciones pulmonares.
Y la OMS señala que, en algunos casos, dejar el cigarrillo puede llevar a la salud de la persona al nivel de que no haya fumado nunca. ¿Pero cuánto tiempo demora esto?
En el marco del Día Mundial sin Tabaco que se celebra este 31 de mayo, te dejamos una guía de cómo abandonar el tabaco beneficia a la salud en el tiempo:
Los fumadores que dejan de fumar, a cualquier edad, tienen menos riesgo de morir por enfermedades asociadas con el tabaco que los que continúan fumando. Además, mejoran mucho su calidad de vida:
Dejar de fumar a los 30 años: Los fumadores que dejan el tabaco alrededor de los 30 años de edad reducen su probabilidad de morir prematuramente por enfermedades relacionadas con fumar en más del 90%
Dejar de fumar a los 50 años: Los fumadores que dejan de fumar alrededor de los 50 años de edad reducen su riesgo de muerte prematura en más del 50% en comparación con quienes siguen fumando
Dejar de fumar a los 60 años: Mismo los que dejan el tabaco alrededor de los 60 años de edad o más viven más tiempo que los que siguen fumando
Cuanto antes se deja de fumar, más beneficios se obtienen.
Beneficios para la salud del fumador:
Los beneficios comienzan a sentirse enseguida y se multiplican de manera progresiva:
A los 20 minutos: disminuye la presión arterial
A las 12 horas: se normaliza el monóxido de carbono en sangre
Entre las 2 semanas y los 3 meses: mejora la circulación y la función pulmonar
Entre el primer y el noveno mes: disminuye la tos y la falta de aire, disminuye el riesgo de infecciones
Al año: el riesgo de enfermedad coronaria disminuye a la mitad, mejora la energía
A los 5 años: el riesgo de cáncer de boca, garganta, esófago y vejiga disminuye a la mitad y el riesgo de cáncer de cuello y de ACV se iguala al de un no fumador
A los 10 años: el riesgo de cáncer de pulmón disminuye a la mitad y también disminuye el riesgo de cáncer de laringe y de páncreas
A los 15 años: el riesgo de enfermedad coronaria es similar al de un no fumador.
Otros beneficios:
Mejora el gusto y el olfato
Desaparece la tos de fumador
Es más fácil subir escaleras y caminar varias cuadras sin cansarse.
El pelo y la ropa huelen mejor.
Mejora el aspecto y la salud de su piel
Beneficios para los convivientes no fumadores.
El consumo de tabaco no solo afecta la salud del fumador sino también la de los que lo rodean. La exposición al humo de tabaco ajeno causa un 30% de aumento en el riesgo de infarto y de cáncer de pulmón en los no fumadores. En los niños, la exposición es particularmente dañina provocando problemas respiratorios, infecciones del oído y el síndrome de muerte súbita del lactante. Las embarazadas expuestas también pueden sufrir complicaciones. Al dejar de fumar estos riesgos desaparecen.
En otras palabras, entre más pronto se deja de fumar, antes se verá los beneficios.
Una buena razón para intentarlo, ¿no crees?
Fuente: BBC Mundo