Se celebra un nuevo Día Mundial del Sueño, fecha creada por profesionales expertos en salud y que busca que las personas reflexionen sobre la importancia de dormir bien y de tener un descanso reparador.
De acuerdo a los expertos en salud del sueño, dormir bien impacta directamente en una buena salud a nivel físico y mental.
Este día se de además previo a que el próximo 1 de abril se produzca el inicio del horario de invierno, cambio de hora que afectará a todo el territorio nacional cuando se deban retrasar los relojes en una hora, con excepción de la región de Magallanes y la Antártica Chilena.
Al respecto, la psicóloga de la Mutual de Seguridad, Rocío Amaya entregó algunas recomendaciones para enfrentar el proceso de cambio de hora y hacer los ajustes a tiempo, dentro de las que destaca principalmente que “no todas las personas necesitan las mismas horas de descanso, por lo que se recomienda ajustar la rutina a los requerimientos de cada uno“.
Por su parte, el psicólogo de la ACHS Armando Enríquez, apunta que si no se descansa lo necesario “hay un estado de fatiga emocional y física, las personas se sienten menos capaces de resolver problemas cotidianos, manejar las emociones y conductas, además de adaptarse al cambio”.
¿Cuántas horas hay que dormir?
Ambos especialistas coinciden en que lo recomendable para un adulto es dormir entre 7 y 9 horas ininterrumpidas. Sin embargo, se debe poner atención a lo que demanda el cuerpo de cada persona.
En tanto, los niños y adolescentes suelen necesitar más horas de descanso diariamente.
Recomendaciones para mejorar la higiene del sueño
En ese sentido, para poder dormir mejor, ambos expertos recomiendan tomar algunas medidas como:
Mantener el lugar de descanso limpio, fresco y cómodo.
Evitar la automedicación. Si siente que el mal dormir es un problema prolongado o que afecta su calidad de vida, consultar a un especialista.
Evitar la sobrecarga de horas extras en el trabajo. Generar una rutina de sueño que propicie el relajo.
Desconectarse de los aparatos electrónicos y preferir un libro.
Cenar ligero antes de dormir, y evitar tomar líquidos hasta dos horas antes.
Establecer horarios regulares, levantarse y acostarse a la misma hora para mantener en equilibrio los ritmos biológicos, y así lograr mayor eficacia en el descanso y mejor rendimiento en las actividades diarias.
Con información de ADNRadio