Enrique Cárdenas Sánchez pidió 20 millones de pesos al dirigente del PAN, Marko Cortés, para aceptar ser candidato de ese partido para gobernador de Puebla en la elección extraordinaria de 2019, que perdió.
Así se establece en una conversación que sostuvo vía WhatsApp, 15 días antes de la elección, con Ana Teresa Aranda, cuyas capturas de pantalla fueron filtradas esta semana por militantes panistas a Crónica Puebla.
En dicha conversación, Enrique Cárdenas, director de la asociación civil “Puebla Contra la Corrupción y la Impunidad”, expresa con claridad su preocupación porque Marko Cortés no le ha cumplido totalmente el acuerdo.
“Te puedo preguntar cuanto te deben para decirles?” (sic), pregunta Aranda.
Y el exrector de la UDLA-P responde:
“Gracias si dieron 8 (millones) en abril y me deben 12 (millones) que fue el trato con Marko” (sic). Este episodio no aparece en la serie de libros “Dinero ilegal y elecciones en Puebla”, recientemente publicados bajo el patrocinio de la asociación civil “Puebla Contra la Corrupción y la Impunidad”.
“Estuve en la noche en el hotel con la gente de Marko (Cortés)”, cuenta el exrector de la UDLA-P a Ana Teresa Aranda.
Ella le pregunta:
“Y qué pasó?”
Enrique Cárdenas responde, pero incluso amaga con armar “un desmadre” si el PAN incumple con el pago prometido de 20 millones de pesos:
—Pues todo se volvió un desmadre. Entre que no tienen las listas completas y lo del recurso, estoy muy preocupado.
—Mmmm.
—Lo que más me preocupa es lo del recurso. Tienen dos semanas diciéndonos que ya viene y ya viene. ¿Te acuerdas?
—No creo que te vayan a quedar mal —expresa Ana Tere.
Es ahí cuando el candidato del PAN amenaza y de paso exhibe las pugnas al interior de Acción Nacional:
—Pues una cosa si te puedo decir. Si me quedan mal y no cumplen de aquí al sábado, el domingo hago rueda de prensa y les armo un desmadre. A estas alturas ya que (sic). Los únicos perjudicados van a ser ustedes que se quieren joder a Genoveva (Huerta, dirigente del partido) y a los morenovallistas.
—Enrique no te queda andar amenazando. No es propio de ti.
—Lo sé pero ya me tienen hasta la madre y no me cumplen.
—Déjame hablar con Lalo a ver qué me dice. Te puedo preguntar cuanto te deben para decirles? (sic).
—Gracias si dieron 8 (millones) en abril y me deben 12 (millones) que fue el trato con Marko (Cortés).
—Ok. Déjame checarlo.
Militantes del PAN explican que Enrique Cárdenas nunca hizo el “desmadre” anunciado debido a que, días antes de la elección, el Partido Acción Nacional le pagó los 12 millones de pesos que restaban para completar los 20 millones establecidos para aceptar la candidatura, a la que nunca renunció ni en público ni en privado.
El domingo 2 de julio de 2019 perdió ante el hoy gobernador constitucional de Puebla, Miguel Barbosa Huerta.
CANDIDATO IMPUESTO
Para la elección extraordinaria de ese año, Enrique Cárdenas Sánchez fue impuesto como candidato por un “dedazo” de Marko Cortés, presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN, tras el suceso aéreo en el que perdió la vida la gobernadora Martha Erika Alonso junto con su esposo, el ex mandatario y senador en funciones Rafael Moreno Valle, y tres personas más, el 24 de diciembre de 2018.
Misteriosamente, Cortés se decantó a favor de quien no militaba en Acción Nacional, de quien además se había asumido como un crítico del morenovallismo y de quien en 2018 intentó ser candidato de Morena a la gubernatura.
Al hacerlo, el líder azul pasó por encima de panistas con trayectoria que se habían registrado en el proceso interno, como Francisco Fraile, Luis Paredes Moctezuma, Blanca Jiménez, Inés Saturnino López y Guillermo Velázquez, entonces presidente municipal de Atlixco, lo que causó serias divisiones en las filas del partido.
Marko Cortés no tomó en cuenta la opinión del panismo poblano y la postulación no fue bien recibida. Cárdenas ni siquiera se preocupó por inscribirse en el proceso interno.
La conversación vía WhatsApp con Ana Teresa Aranda en poder de Crónica Puebla deja al descubierto que el PAN le pagó 20 millones de pesos a cambio de que aceptara ser el candidato, un candidato solitario y abandonado por los principales liderazgos de Acción Nacional, que nunca se sumaron a la campaña.
Hoy se entiende por qué.
PALADÍN ANTICORRUPCIÓN: “NO ME CUMPLEN”
El pasado 9 de julio, en el periódico El Financiero, donde colabora con regularidad, Enrique Cárdenas presumió la publicación de una trilogía de libros editados por la organización “Puebla Contra la Corrupción y la Impunidad”, que encabeza.
Las obras consisten en una serie de reportajes mal redactados y mal investigados sobre las elecciones de 2018 y la extraordinaria de 2019.
Según el ex candidato del PAN, “estos procesos electorales fueron testigos de lo más podrido de nuestro sistema político electoral”.
En ninguno de los tres tomos de “Dinero ilegal y elecciones” aparece la negociación secreta de Enrique Cárdenas Sánchez con Marko Cortés por su candidatura ni el episodio en el que expresa su irritación a Ana Teresa Aranda porque el presidente del Partido Acción Nacional sólo le ha pagado 8 millones de los 20 millones acordados.
Como lo expresaría el paladín anticorrupción:
“Lo que más preocupa es lo del recurso ( ) ya me tienen hasta la madre y no me cumplen” (sic).
Y DENUNCIADO POR PECULADO Y DEFRAUDACIÓN FISCAL
En mayo de 2019, el entonces candidato del PAN al gobierno de Puebla, Enrique Cárdenas Sánchez, fue denunciado ante la Fiscalía General de la República (FGR) por el académico de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), Álvaro Ramírez Rivera, por presunto peculado y defraudación fiscal.
De acuerdo con la denuncia presentada ante la Fiscalía General de la República, Cárdenas Sánchez habría defraudado a la autoridad fiscal al no comprobar 14 millones 250 mil 138 pesos durante los 11 años que dirigió al Centro de Estudios Espinosa Yglesias, A. C. (CEEY).
Una nota del diario El Universal explicaba entonces que el docente de la Facultad de Derecho de la BUAP dijo que la investigación la realizó a través del portal de consulta a asociaciones donatarias autorizadas del Sistema de Administración Tributaria (SAT), en el que encontró que el exdirector del CEEY cobró un salario mayor al que le permitía la ley.
De acuerdo con la denuncia, en la declaración 3de3 de Cárdenas Sánchez se encuentra que recibió 2 millones 274 mil 244 pesos anuales como director del Centro, pero sólo en 2017 recibió 4 millones 114 mil 982 pesos.
En los 11 años que fue director del CEEY, obtuvo una remuneración de 24 millones 130 mil 510 pesos. Este monto llegó a ser mayor a 5% –que es lo que permite el Reglamento de la Ley de Impuesto Sobre la Renta– del total de los ingresos del centro.
El artículo 138 de la legislación indica que los donativos de una asociación civil como el centro de estudios no podrá destinar más de 5% de sus ingresos anuales netos a los gastos administrativos, que incluyen las remuneraciones del personal, renta de muebles e inmuebles, pagos de luz, teléfono, papelería y mantenimiento; pero Cárdenas Sánchez destinó a su sueldo hasta 19% en 2008.
Durante los dos primeros años que Cárdenas Sánchez fue director, 2006 y 2007, el monto de su salario fue de 225 mil 930 pesos y 254 mil 868 pesos, respectivamente, representando 3% del total de los ingresos del CEEY.
A partir de 2008, Cárdenas Sánchez ocupó 19% del total de los ingresos del centro, pues en ese año percibió un millón 948 mil 241 pesos, cuando los ingresos del CEEY fueron (entre donaciones y venta de libros) de 10 millones 948 mil 241 pesos.
En 2009, el salario del ex candidato al gobierno de Puebla fue de 2 millones 532 mil, cinco pesos, correspondiente a 17% del total de los ingresos de ese año en el centro.
En 2011, 2012 y 2015, el Centro de Estudios Espinosa Yglesias informó al SAT que no se erogó monto alguno en el concepto de director ejecutivo, cargo que sí desempeñó en esos años Enrique Cárdenas. Para Ramírez Rivera eso fue totalmente irregular.
En su último año como director, 2017, Enrique Cárdenas recibió 4 millones 114 mil 982 pesos como remuneración, lo que representó 9% de los ingresos del CEEY. De acuerdo con el Reglamento de la Ley de Impuesto Sobre la Renta, el monto para su sueldo no podía ser mayor a 2 millones 318 mil 402 pesos.
En su denuncia, el abogado explica que al destinar más de 5% de los donativos para gastos administrativos, “se debió realizar el pago de impuestos de éstos como si se trataran de remanente distribuibles, situación que no ocurrió”.