Siete de diez regidores del municipio de Tlahuapan acudieron al Congreso del Estado para pedir la revocación de mandato del presidente, Vidal Roa Benítez, lo acusaron de no sesionar desde hace varios meses, por abuso de autoridad, nepotismo y porque ha retirado facultades a regidores que no lo quieren apoyar. Esta es la segunda solicitud que formalmente reciben los legisladores.
Ana Karen Altamirano, regidora de Gobernación de Tlahuapan, explicó que el edil ha usurpado funciones, ha ocupado programas sociales para favorecer a familiares, así como amigos cercanos, y la inseguridad ha incrementado en la demarcación, ya que ocupa a los elementos se seguridad como “guardias personales”.
Compartió que, aproximadamente hace un mes fue retirada de sus funciones como regidora de Gobernación, sin embargo, por usos y costumbres los ciudadanos le siguen pidiendo ayuda. Al acudir con la Policía Estatal, Guardia Nacional, y la Policía Municipal, le mencionan que el primer regidor, les pidió que ignoren sus llamados y que serán dados de baja si atienden sus peticiones. Todo lo anterior pese a que a ella le llegan los reportes de posibles linchamientos y asaltos.
“Dado a que me quitó las facultades, los elementos ya no me atienden ni me dan datos, les avisaron que si me apoyaban serían dados de baja, y me dejan en incertidumbre porque cuando la población me pide una patrulla no puedo enviarlas. He tenido reuniones con comités de vecinos vigilantes para explicarles esto, pero todos coinciden que ha incrementado la seguridad”, señaló.
También denunció que Roa Benítez no ha llegado a las sesiones de cabildo desde hace más de un mes, las cancela ese mismo día y no da justificaciones a los regidores. En suma, los funcionarios públicos le han pedido en reiteradas ocasiones los documentos de las licitaciones de obra públicas, pero se ha negado.
Fuente: El Sol de Puebla