Julio Scherer Ibarra, exconsejero jurídico de la Presidencia de la República, no solo es investigado por presuntamente frenar un procedimiento administrativo y penal por irregularidades en la concesión del Viaducto Bicentenario otorgada a OHL (hoy Aleática); la Fiscalía General de la República (FGR) indaga si el exfuncionario obtuvo un beneficio personal por sus gestiones, pues existen indicios de que familiares y socios suyos han laborado en firmas de abogados al servicio de esa constructora.
El despacho de su hermano Pedro Scherer, ADS, fue contratado directamente por OHL para la reestructura de una deuda, mientras que su sobrino y el hijo de su pareja trabajan en un despacho de abogados, “Rivera Gaxiola, Kalloi, Fernández, Del Castillo, Quevedo, Lagos y Machuca”, que representa a los principales accionistas de la constructora. El propio Julio Scherer fue socio de esa misma firma de abogados.
Incluso en 2016 los litigantes del despacho de Gaxiola, junto con Scherer, fungieron como representantes legales del hoy presidente Andrés Manuel López Obrador en un litigio que este inició en contra del diario Wall Street Journal por una nota publicada sobre propiedades no declaradas. Así consta en el documento de la denuncia subido en la página del propio López Obrador.
Cuestionado por Animal Político sobre si lo anterior podría significar un posible conflicto de interés, Julio Scherer consideró que no, pues personalmente “no tenía relación alguna” con Aléatica ni sus representantes mientras fungió como consejero jurídico.
La FGR inició una carpeta de investigación en la que presume que Scherer utilizó sus facultades legales y se coludió con otros funcionarios públicos para validar una concesión que le reporta a Aleática ingresos millonarios. Esto, mediante actos de autoridad emitidos por Scherer desde su cargo como consejero jurídico, y mientras sus familiares y allegados tenían una relación contractual con despachos al servicio de la constructora.
De acuerdo con datos contenidos en el expediente ministerial, en abril de 2020 –cuando Aleática aun enfrentaba un inminente conflicto por las irregularidades en el Viaducto Bicentenario– la constructora le pagó alrededor de 200 millones de pesos al despacho ADS, del que es socio Pedro Scherer Ibarra, como honorarios por el refinanciamiento de la deuda de la Autopista Urbana Norte, que también le fue concesionada a Aleática.
Poco después de ese pago, ese mismo mes, ante la fe del notario público 121 en el Estado de México, la empresa IFM Investors Pty Ltdl –principal accionista de OHL Aleática– nombró como uno de sus apoderados legales al abogado Rodrigo Lagos Scherer, quien es sobrino de Julio Scherer Ibarra. Este medio tiene copia de ese documento.
Lagos Scherer es a su vez socio de la firma de abogados “Rivera Gaxiola, Kalloi, Fernández, Del Castillo, Quevedo, Lagos y Machuca”, que es uno de los despachos que defiende a Aleática en diversos conflictos, entre ellos el que mantienen con el abogado Paulo Díez, quien ha denunciado desde hace varios años irregularidades en las concesiones a esta empresa. En el despacho trabaja, pero como abogado pasante, Carlos Suarez Tavernier, hijo de la actual pareja de Julio Scherer Ibarra.
El despacho es encabezado por el abogado Alonso Rivera Gaxiola, que también fue designado como apoderado de IFM en abril de 2020, junto con el sobrino del entonces consejero jurídico de la Presidencia.
El propio Julio Scherer consignó en su currículum, presentado ante la Consejería Jurídica de la Presidencia y que puede revisarse en la Plataforma Nacional de Transparencia, que ha sido socio del despacho del abogado Rivera Gaxiola, cuando este se denominaba Rivera, Gaxiola, Carrasco y Kalloi S.C.
Aunque Scherer dejó de ser socio de Rivera Gaxiola en 2013, según lo asentado en el currículum, la relación entre él y su familia con el despacho se mantuvo en los años siguientes. Prueba de ello es que, en 2016, tanto Rivera Gaxiola como Scherer Ibarra y Suarez Tavernier fueron autorizados en conjunto por Andrés Manuel López Obrador para representarlo en la demanda civil promovida por daño moral en contra de Dow Jones & Company por una nota publicada en el diario Wall Street Journal.
Dicha nota reportaba la existencia de al menos dos propiedades que el entonces aspirante a la presidencia de México había omitido en su declaración patrimonial 3 de 3. Obrador consideró que la publicación perjudicaba su imagen, pues la información no había sido bien corroborada. Hasta donde se sabe, dicha demanda judicial no prosperó.
Julio Scherer confirmó a Animal Político todos los vínculos mencionados previamente, pero insistió en que esto no constituye –a su juicio– ningún conflicto de interés, pues el dejó de ser socio de Gaxiola hace años, y el trabajo de sus familiares en esas firmas viene de años previos.
En la carpeta de investigación abierta por la FGR en contra de Scherer por múltiples delitos se denuncia que el despacho del abogado Alonso Rivera Gaxiola, en su calidad de representante de la empresa Aleática, fue uno de los beneficiados de manera indirecta por la determinación de la SCT de legalizar la concesión que esa empresa ostenta para la construcción y explotación del Viaducto Bicentenario hasta el año 2038.
Fuente: Animal Político