El CEN del PAN ordenó que una mujer ocupé la presidencia del Comité Directivo Estatal de Puebla para el periodo 2021-2024, lo que apuntala la reelección de Genoveva Huerta, hasta ahora la única que ha manifestado interés por el cargo. De hecho, en la contienda por la presidencia no podrán registrarse hombres.
El Comité Ejecutivo Nacional del PAN aprobó por unanimidad integrar la paridad horizontal y vertical de género en la renovación de las dirigencias de los Comités Directivos Estatales, luego de un ejercicio de análisis con las entidades federativas.
El acuerdo es por convicción partidista y acorde a la reciente reforma de paridad total impulsada por Acción Nacional y por los antecedentes del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y las dirigencias del PAN en las alcaldías de la Ciudad de México, para que la mitad de los CDE´s sean presididos por mujeres.
La propuesta, aprobada por los integrantes del CEN, es utilizar el criterio constitucional de formación de bloques, que se emplea en las elecciones constitucionales para determinar la reserva de género de las diputaciones, ayuntamientos y gubernaturas.
De esta manera, las convocatorias definirán la reserva de género femenino, permitiendo a las y los aspirantes tener certeza.
Con la propuesta del presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN se aprueban las acciones afirmativas para garantizar la paridad vertical y horizontal en la integración de los CDE´s en el periodo 2021-2024.
En el caso de la paridad vertical, se aprueba que en todos los casos Presidencia y Secretaría recaiga en género distinto. Y en la horizontal se reservan los estados de Morelos, Campeche, Puebla, Sinaloa, Oaxaca, Zacatecas, Michoacán, Colima, Tlaxcala, Hidalgo, Baja California Sur, San Luis Potosí, Jalisco y Tabasco, a fin de que el registro de candidaturas a la Presidencia, únicamente puedan contender personas de género femenino.
El dirigente nacional del PAN, Marko Cortés Mendoza, destacó que el acuerdo acredita nuestra convicción de igualdad sustantiva, preceptos que quedaron pendientes de ser llevados a nuestros estatutos en nuestra pospuesta (por razón de la pandemia) Asamblea Nacional Extraordinaria, siendo parte del esfuerzo que muchas mujeres impulsaron junto con la secretaria de Promoción Política de la Mujer, Adriana Aguilar, y que ahora también es entendible y aceptable para la mayoría de los panistas.