La agencia calificadora Moody's recortó este viernes la calificación de Petróleos Mexicanos (Pemex) en dos escalones, de 'Baa3' a 'Ba2', con lo que la coloca en grado especulativo y pierde el grado de inversión, al ser ya dos las firmas (junto a Fitch) que tienen a la empresa estatal en dicha posición.

El movimiento se dio en línea con el recorte a la nota del soberano.

"Las acciones tomaron en consideración nuestras expectativas de un periodo prolongado de negativo libre flujo de caja y la necesidad de financiamiento externo, a pesar de los esfuerzos de la compañía para ajustar los costos y las inversiones por los bajos precios del petróleo", dijo Nymia Almeida, vicepresidenta sénior de Moody's.

Con Moody's, ya son dos las calificadores que ponen a Pemex en grado especulativo. Fitch, que ya tenía a Pemex en esa posicion, recortó más temprano este viernes la nota de la petrolera desde 'BB' a 'BB-'.

La posición en grado especulativo de dos calificadores provoca que se cumpla la condición de fondos de inversiones para desprenderse de papel considerado 'bono basura'.

"Ya son dos agencias calificadoras las que le han quitado el grado de inversión a los bonos en moneda extranjera de Pemex: Fitch y Moody's. La noticia de hoy de Moody's obligará a varios inversionistas a vender sus bonos de Pemex en las próximas semanas o meses", dice Alonso Cervera, economista en jefe de Credit Suisse.

“Ahora sí, Moody's recortó la calificación de Pemex, junto con Fitch. La petrolera ya está en grado especulativo. Muchos fondos venderán estos bonos por mandato, aunque creo que ya estaba descontado, aun así veremos salida de flujos”, explica Jacobo Rodríguez, director de Análisis Financiero en BW Capital.

Moody’s reconoció que la dirección actual de Pemex logró estabilizar la producción de petróleo y refinanciar la deuda de la petrolera. No obstante, argumenta, el futuro de la compañía es incierto debido a los bajos precios actuales del petróleo y los próximos vencimientos de deuda.

La calificadora de riesgo también criticó que Pemex esté priorizando el negocio de refinación, por encima de la exploración y producción.

Recientemente el Gobierno federal anunció que reducirá la tasa de Derecho de Utilidad Compartida (DUC), es decir, el aporte fiscal que hace la petrolera al Gobierno. Al respecto, la calificadora consideró que el apoyo no será suficiente y que la administración federal seguirá apoyando financieramente a la firma.

“Esto era inevitable (la baja de nota) dado el manejo de Pemex. Forzar a Pemex a maximizar producción a costa de tener pérdidas millonarias fue la causante principal (de la decisión de las calificadoras)”, dijo Pablo Medina, vicepresidente de la consultora Welligence.

De acuerdo con Moody’s, la petrolera tendrá que recurrir a deuda este año para cumplir con los objetivos que se han establecido y mantener la producción estable a niveles de 2019.