A martillazos, una mujer terminó con la vida de su hijo presuntamente por tratar de defenderse de las agresiones del menor de 15 años, quien se presume presentaba espectro autista y tuvo una crisis… el homicidio ocurrió en el fraccionamiento Juan C. Doria de la ciudad de Pachuca.
"Se comenta que llegó una señora al mercado a comprar comida para ella y su niño, supuestamente no abrió el local donde acostumbraban a comer y pues el niño tenía ganas de hacer sus necesidades, se fueron a su departamento que tienen a un lado del mercado, el niño como padece de sus facultades mentales se le hizo fácil hacerse en la calle, la señora le dijo que no… el niño se puso agresivo porque a final de cuentas tenía hambre y trató de golpear a la señora”, dijo un vecino.
"Estaban un poco mal de sus facultades, los vecinos dicen que sí veían un poco mal de sus facultades mentales tanto a la mamá como al niño", dijo otro colono.
Autoridades del Ministerio Público revelaron que la mujer denunció su crimen, señaló que actuó en defensa propia, después dijo que perdió el conocimiento y que al despertar vio a su hijo de 15 años sin vida.
Declaró que ella solo le había dado un golpe, sin embargo, los resultados de la necropsia revelaron que fueron 30.
La Procuraduría General de Justicia de Hidalgo inició un proceso bajo el protocolo de perspectiva de género.
"La Procuraduría enfrentó una situación poco usual por no decir inédita en la que intervienen varios factores que conviene precisar, primero que acudió a la instancia del Ministerio Público una mujer que nos dice en ese momento que ha privado de la vida a su hijo, que su hijo padecía de un síndrome que provocó una situación de tensión y que esto había sido el motivo de los hechos", dijo Raúl Arroyo, procurador general de Justicia de Hidalgo.
El suceso fue calificado como un caso inédito en el que se debe evitar revictimizar a la madre del menor, quien es valorada en el Hospital General de Pachuca y se mantiene bajo vigilancia médica y policial.
"Por los hechos que nos narraba esta persona advertíamos que su estado emocional requería de un tratamiento especial, no podíamos solicitar inmediatamente su reclusión, al contrario, debíamos prever que hubiera opiniones técnicas inmediatas que nos advirtieran cuál era su estado emocional".
La madre de la víctima continuará en el nosocomio hasta estabilizar su salud emocional, para después acudir ante las autoridades quienes determinarán su situación jurídica.
Fuente: Excélsior