“Reloj sin marca con emblema ‘presidente Constitucional 1988-1994‘ en caja de acero esmaltado y pulso de piel maltratado”. Así describió un perito de la Fiscalía federal mexicana una de las joyas que fueron incautadas en 1993 a Joaquín “El Chapo” Guzmán. El periodo al que hace referencia la joya coincide con los años cuando el Presidente de México era Carlos Salinas de Gortari y con el primer ascenso en la carrera delictiva de Guzmán, antes de su primera detención.
La descripción forma parte de un inventario sin fotografías de un lote de 103 joyas que fue incautado al “Chapo” el año de su primera detención, según fuentes de Univision Investiga, y cuyo destino hoy es un misterio.
“En esos años el PRI hizo más de 100 mil relojes con los emblemas presidenciales, también durante la campaña de Salinas. Lo podía tener cualquiera, no eran relojes que necesariamente entregaba el candidato”, dijo para esta investigación una persona cercana a la familia Salinas.
Según las fuentes, las joyas nunca se han vendido. El lote incluiría también un dije de oro de 14 quilates con 120 diamantes y una inscripción con el nombre “Chapo”, además de otras joyas con alusiones a su familia. Hoy, las autoridades dicen que desconocen su paradero.
“No tengo un mayor detalle sobre su administración y sobre su destino”, dijo en entrevista Ricardo Rodríguez, director del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), la institución que se encarga del resguardo y custodia de los bienes asegurados.
En una llamada telefónica con su madre a finales de agosto, Guzmán solicitó que el dinero que le sea decomisado después de su sentencia a cadena perpetua vuelva a México y se destine “a comunidades indígenas”, anunciaron a la prensa los abogados mexicanos José Luis González y Juan Pablo Badillo. La fortuna a la que se refería Guzmán, según esta versión, no contemplaría las joyas que siguen en poder del Gobierno mexicano, de acuerdo con fuentes de Univision.
Univision Investiga obtuvo en exclusiva, de una fuente confidencial, un inventario sin fotografías con las descripciones de las joyas que formaron parte de una investigación oficial de 1993, de acuerdo con el informante. El documento incluye descripciones de dijes, anillos, pulseras y varios relojes Rolex, en especial uno, con 332 diamantes blancos. También se describe un juego de collar, pulsera y anillo de oro con 85 zafiros australianos.
“Este lote de salida de subasta podría valer entre 170 y 200 mil dólares. En valor de mercado podría valer entre 400 y 500 mil dólares”, dijo Alba Zabaneh, quien fue durante más de una década perito valuador para el SAE y analizó el documento a solicitud de Univision.
Las descripciones de otras de las joyas en el documento muestran coincidencias con miembros de la familia de Guzmán. La primera es un juego de cachas para pistola con 251 zafiros australianos, 192 diamantes y las letras JG, en probable referencia a las iniciales de Joaquín Guzmán.
Hay dos esclavas de oro con el nombre Alex, dos pendientes con una letra A y otra similar con 59 diamantes y el nombre Gisel, como Alejandrina, primera esposa de Guzmán, y Alejandrina Giselle, una de las hijas de su primer matrimonio.
También está descrita una esclava de dos cadenas tipo Cartier, con el nombre “Chapito” en oro de 14 quilates con 54 diamantes. “Chapito” es el apodo con el que se ha conocido a Iván Archivaldo, otro de los hijos de su primer matrimonio.
Según el inventario, una esclava más tiene escrito el nombre César, otra las iniciales CGZ con 59 diamantes, más una última que contiene la inscripción con el nombre Alfredo y 40 diamantes. César y Alfredo Guzmán son los otros dos hijos del matrimonio del “Chapo” Guzmán y Alejandrina Salazar.
Ahora, las autoridades actuales dicen no tener conocimiento de la existencia del lote ni de la permanencia en poder del SAE, dijo en entrevista con Univision su actual director, Ricardo Rodríguez.
“Me entero por usted de la existencia de esas joyas”, dijo Rodríguez, cuando el equipo de Univision estaba instalándose.
Ya en la entrevista, afirmó que tienen lotes de más de diez años en resguardo y que este podría ser uno de esos. Rodríguez fue muy cuidadoso en no mencionar el nombre de Guzmán y siempre le llamó “la persona que comentas” ante las preguntas específicas sobre sus bienes.
“Si las joyas no nada más del personaje comentas sino de otros personajes no se habían vendido o no se les da un destino es porque no había esa coordinación con la PGR, ahora Fiscalía. Esa falta de coordinación hacía que el Ministerio Público no declare en abandono y podrían pasar diez años administrando dichos bienes y se quedaban en el almacén. Ahora ya no”, aseguró.
Fuente: Sinembargo