Keith Raniere, identificado por autoridades de Estados Unidos como líder de la secta NXIVM, habría forzado a tres hermanas mexicanas a las que embarazó a abortar, esto declaró una de ellas de acuerdo con medios de Estados Unidos.
Una de las tres hermanas brindó su testimonio a la Fiscalía estadounidense en una corte de Nueva York, dijo que supo a fines de 2006 se dio cuenta de que estaba embarazada y Raniere le habría dicho que debía ir a una clínica para abortar, reportaron The Daily Beast y Buzz Feed
La mujer declaró que tiempo después supo que fue obliga a acudir a la misma clínica a la que su hermana mayor fue enviada dos años antes, por el mismo motivo, después de tener sexo con Raniere.
“No quería tener un bebé y no quería tener un bebé con Keith”, dijo la mujer identificada por la Fiscalía como Daniela. “Estaba con muchas mujeres y estaba con mi hermana y eso no estaba bien”, reportó el The Daily Beast.
Keith Raniere, fundador de la firma de autoayuda y supuesta secta sexual Nxivm tiene 58 años y está acusado de dirigir en secreto un esquema de pirámide de culto en el que estafó y esclavizó a sus integrantes. Durante el juicio en su contra se ha declarado inocente de cargos de tráfico sexual, conspiración de extorsión, explotación infantil y pornografía infantil.
Los medios estadounidenses revelaron que Raniere habría dicho a Daniela que el aborto sería una oportunidad para “perder peso debido a los cambios hormonales”, incluso, para convencerla, le dijo que “los atletas olímpicos se practican abortos como parte de su entrenamiento”.
Daniela expuso que Rainere esperó a que ella cumpliera 18 años para tener relaciones. Durante su vida sexual él le recalcó que si quedaba embarazada debía abortar.
La mujer narró que cuando se enteró del embarazo estaba nerviosa por contarle a Rainere, pero éste, sereno, le contó que su hermana mayor también había abortado años antes.
“Me quedé impactada. No tenía idea de que Mariana, que una vez fue mi mejor amiga, alguna vez estuvo embarazada “, dijo Daniela. “[Keith] me dijo que no era gran cosa y que él pagaría por el aborto”, dijo citada por The Daily Beast.
Pamela Cafritz, entonces novia de Raniere, acompañó a la joven para que abortara, incluso le dijo qué podría responder a sus familiares u otros miembros de NXIVM por si era cuestionada.
Daniela testificó que Raniere no la acompañó durante el proceso ni a ella ni a su hermana menor cuando quedó embarazada, dos años después. La más jóvenes de las hermanas habría comenzado a tener una relaciones con el acusado a los 15 años y presentó un aborto al ser una adulta.
MEXICANAS VÍCTIMAS DE NXIVM
Algunos miembros de una familia mexicana viajaron al estado de Nueva York a inicios de la década del 2000 con la intención de recibir iluminación espiritual del gurú de autoayuda Keith Raniere. Pero lo que recibieron fue mucho más sórdido.
La semana pasada la Fiscalía dijo que Raniere explotó sexualmente a tres hermanas de la familia y confinó a una de ellas durante dos años por desafiar sus arbitrarios edictos.
“Todo era mentira”, dijo esta semana la hermana cautiva durante el juicio federal contra Raniere por tráfico sexual, que se realiza en Brooklyn. “Fui entrampada”.
El desgarrador testimonio sobre el trato dado a las hermanas mexicanas antes de que comenzaran los marcajes cautivó a la corte el pasado 24 de maro, mientras el hombre conocido como “Vanguard” por sus seguidores miraba desde la mesa de la defensa, tomando notas, pero sin mostrar emoción alguna.
Una de las hermanas (cuyos nombres completos no fueron revelados por la fiscalía por razones de privacidad) ofreció un testimonio sexualmente gráfico de la experiencia de su familia con Raniere.
Todo comenzó cuando sus padres, tras tomar cursos de NXIVM, cayeron bajo la influencia de alguien que la organización describía como “el hombre más inteligente del mundo”, declaró.
La mujer, ahora de 33 años, abandonó su educación formal para ir a la sede del grupo en el área de Albany para trabajar como pasante en el 2002, cuando tenía 16 años, dijo.
Conocer a Raniere era como conocer a una “estrella de rock”, declaró, pero la experiencia se tornó amarga muy pronto cuando se encontró realizando trabajos domésticos sin paga. También fue acusada de “violaciones éticas” inventadas.
Raniere, quien tenía cuarenta y tantos años en ese entonces, se ofreció a tutelarla antes de insinuar que debía tomar su virginidad cuando cumpliera 18, relató la mujer.
Pronto fue incluida en un “círculo interno” de seguidores que cumplía todas las necesidades de Raniere, fueran sexuales o de otro tipo, añadió. Él decía que el sexo era necesario para “ayudarles a crecer”, relató.
Tiempo después, su hermana mayor fue enviada a NXIVM y también se convirtió en una de las muchas parejas sexuales de Raniere, señaló. Todas tenían que cumplir con una serie de normas estrictas: No tener sexo con otros hombres, no usar anticonceptivos, no engordar y no decirle a nadie.
En un momento dado, Raniere intentó seducirla a ella y a su hermana mayor para que hicieran un trío, denunció. Pero antes de que las cosas pudieran llegar tan lejos, señaló, “estaba llorando. Ella estaba llorando. Me sentía sucia”.
"La situación empeoró cuando una hermana menor, en ese entonces de sólo 15 años, fue enviada al mundo de NXIVM, dijo la testigo. Cuando Raniere le dijo que estaba teniendo relaciones sexuales con la hermana adolescente, en un principio ella se sintió “celosa” de que “me hiciera esperar hasta mi cumpleaños 18”.
Vio cómo su hermana menor cayó en una depresión tan profunda que comenzó a hacerse cortadas. En retrospectiva, “lamento profundamente que no la saqué de allí”, agregó.
A medida que las tensiones con Raniere aumentaban, él dejó de hablarle a la hermana de en medio y le ordenó a una de sus seguidoras más fieles que la metiera en una recámara en la que sólo había un colchón, una pluma y papel para que le escribiera disculpas al líder.
Esa seguidora, Lauren Salzman, declaró como testigo que coopera con el Gobierno que lo que se suponía iba a ser un castigo breve para la hermana se extendió casi dos años por órdenes de Raniere y con la aprobación de los padres de ella. Cuando por fin ella exigió que la dejaran salir en 2010, fue enviada de regreso a México.La hermana continuará su historia con más testimonios en el juicio el martes. Salzman insinuó que no tiene un final feliz.Los familiares “tenían una relación cercana cuando llegaron con nosotros, y esas relaciones fueron increíblemente fracturadas”, afirmó Salzman. “Y no sé cómo puedes recuperarte algún día de eso. Creo que es terrible”.
Fuente: Sinembargo