El gobierno federal decidió comprar los autotanques para salir de la contingencia del desabasto de combustible mediante una filial privada de Petróleos Mexicanos (Pemex) a la que no le aplica la Ley de Adquisiciones de la Administración Pública.
Además, modificó antes de la firma de los contratos dos convenios, porque las empresas reconocieron no poder cumplir los compromisos, lo que elevó el número de unidades y el costo de la inversión pero no logró la meta de alcanzar la capacidad para transportar 150 mil barriles diarios de combustible.
De acuerdo a la ficha técnica de la adquisición de los autotanques que compartió el gobierno federal, el 16 de enero se convocaron a 22 empresas nacionales y extranjeras, a la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones A.C. de México y a la Asociación de Fabricantes de Tractocamiones de Estados Unidos.
Aquellos que cumplieron con las especificaciones técnicas y fechas de entrega fueron convocadas a una subasta en la que ofrecieron sus mejores ofertas.
El 23 de enero se firmó un memorando de entendimiento por 571 auto tanques que equivalían a 117 mil barriles diarios por 75.9 millones de dólares más IVA; aunque se acordó adicionar dos memorandos más para poder alcanzar la meta de 150 mil barriles diarios.
El informe indica que tras dicho acuerdo, “III Servicios S.A. de C.V., filial de Pemex, regulada bajo el derecho privado, es decir no le aplica la Ley de Adquisiciones de la Administración Pública Federal, suscribió los contratos con los fabricantes seleccionados, con las unidades y fechas de entrega definitivas”.
Sin embargo, el 13 de febrero, día en que se concluyó la firma de contratos, se tuvieron que anexar dos modificaciones “debido a que el proveedor no pudo cumplir con los compromisos originales”.
Por lo anterior, el 22 de abril de 2019 la adquisición se incrementó de 571 autotanques a 612 y de 75.9 millones de dólares a 86.4 millones de dólares sin IVA, sin embargo lacapacidad meta solo aumento de 117 mil barriles diarios a 134.5 mil barriles diarios sin alcanzar los 150 mil previstos.
El informe destaca que estas unidades tienen una capacidad mayor (de 30 mil hasta 60 mil litros) que las que se compraron en la pasada administración (de 20 mil a 40 mil litros).
El gobierno federal firmó con la empresa Navistar México un contrato por 53.1 millones de dólares; con Traylfer 4.4 millones de dólares; con Detroit Diesel Allison de México 13.5 millones de dólares; Detroit Diesel Allison de México asociada con Fruehauf por 4.8 millones de dólares.
Además, en una alianza entre tres empresas, se firmó con Scania Comercial un contratopor 2.7 millones de dólares, con Detroit Diesel Allison de México uno más por 2.3 millones de dólares y con Entrans International (HEIL) por 3.4 millones de dólares; así como un memorando más con las empresas Manufactura Especializada en Transporte por 0.7 millones de dólares y con Detroit Diesel Allison de México uno adicional por 1.5 millones de dólares.
El 17 de abril las empresas entregaron la totalidad de tractocamiones y tanques adquiridos y pasaron al proceso de acondicionamiento por parte de Pemex Logística, III Servicios y al Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para iniciar operaciones.
Fuente: Milenio