El posible acuerdo de inversión por 10 mil millones de dólares que negocia México con Estados Unidos para garantizar inversiones en el país y Centroamérica implicaría dar recursos para la construcción del Tren Maya y de la refinería de Dos Bocas, Tabasco, dijo Jesús Seade, subsecretario de México para América del Norte.
El presidente Andrés Manuel López Obrador informó el miércoles sobre una reunión que tuvo con Jared Kushner, asesor sénior de Donald Trump, mandatario de EU, en la que se habló sobre esta inversión.
López Obrador explicó que la mitad de esos recursos se destinarían a México, mientras que la otra mitad se repartiría entre países centroamericanos, como parte de una estrategia para reducir la migración hacia la Unión Americana.
Al respecto, Seade señaló que la mayoría de los fondos destinados para México irían a estos proyectos claves de López Obrador, al menos en una primera etapa, debido a que hay más propuestas específicas adelantadas en México que en los países del llamado 'triángulo del norte' (El Salvador, Honduras y Guatemala).
"Hasta ahora hemos hablado principalmente de los proyectos emblemáticos del presidente", indicó Seade este jueves en el marco de un evento sobre la renegociación del Tratado de Libre Comercio para América del Norte (TLCAN).
"La diferencia es que México está más listo con proyectos específicos", agregó.
El Tren Maya, plantas de limpieza de aguas en la zona franca fronteriza, el aeropuerto capitalino de Santa Lucía y la nueva refinería son algunos de los proyectos sobre los cuales México ha hablado con la Corporación para Inversiones Privadas en el Extranjero de Estados Unidos (OPIC, por sus siglas en ingles), según el subsecretario.
La OPIC es la institución financiera de desarrollo del Gobierno estadounidense que moviliza capitales privados para ayudar a resolver problemas críticos de desarrollo.
"Con el OPIC hemos avanzado muchísimo en encontrar formas en que ellos participen en áreas específicas de los proyectos", remarcó.
Por otra parte, el funcionario considera que entre mayo y junio el Congreso estadounidense podría ratificar el acuerdo que sustituirá al aún vigente TLCAN.
"Los que tienen calendarios políticos inminentes son Estados Unidos y Canadá y me da gusto que ahora están pensando en ponerse las pilas y apretar para que salga antes de medio año", dijo.
Fuente: El Financiero