El presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer este domingo que México aceptó que se reduzca la entrega de dosis de la vacuna Pfizer contra el COVID-19 para que países más pobres puedan acceder a esta, como propuso la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con el objetivo de que no haya acaparamiento, pero agregó que estas dosis serán repuestas.
“Ahora en el mundo hay una polémica porque la ONU le ha pedido a Pfizer que baje sus entregas a los países en los que se tiene contrato, como es el caso nuestro, los países europeos, para que se disponga una cantidad de vacunas a la ONU y que no haya acaparamiento, y que la ONU también ponga esas vacunas a disposición de países más pobres", afirmó.
"De todas formas, no cambia nuestro plan, porque ya estamos buscando otras vacunas, no solo Pfizer. Ya estamos en tratos para que empiece a llegar una vacuna denominada CanSino, de China; y una vacuna de un laboratorio ruso, más una vacuna AstraZeneca, de la Universidad de Oxford. De modo que ya vamos a tener vacunas suficientes", precisó el mandatario federal.
El presidente dijo lo anterior al inaugurar la Universidad para el Bienestar “Benito Juárez” en la comunidad del mismo nombre ubicada en el municipio Juan R. Escudero del estado de Guerrero.