El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, informó este lunes que los fabricantes rusos de la vacuna Sputnik V han presentado solicitud y documentación necesaria a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) para realizar estudios clínicos y obtener la autorización en México.
Sputnik V, de la que se requieren dos inyecciones, fue desarrolla por el Instituto Gamaleya, con sede en la capital rusa.
En noviembre, los creadores de la inyección apuntaron que el análisis provisional de los datos mostró que tenía una efectividad de entre 91.4 y 95 por ciento.
La conclusión se basó en 39 infecciones entre los 18 mil 794 participantes del estudio que recibieron las dos dosis del fármaco o el placebo, que es una tasa de infección mucho menor a la observada por las farmacéuticas occidentales al evaluar la efectividad de sus vacunas. Las otras dos vacunas desarrolladas en Rusia siguen en fase de pruebas.
Rusia presume de que Sputnik V fue la “primera vacuna contra el COVID-19 registrada del mundo" luego de que el Gobierno le dio la aprobación regulatoria a principios de agosto. La medida provocó críticas de los expertos internacionales, que indicaron que en ese momento solo se había probado en unas docenas de personas.
En los últimos meses, se ha ofrecido la Sputnik V a trabajadores sanitarios y profesores, aunque seguía en fase de ensayos avanzados. Varios altos funcionarios declararon haberla recibido y, a principio de semana, el ejército ruso comenzó a inocular a las tripulaciones de la marina que se embarcarán en misiones.
Más de 100 mil personas se han vacunado ya en Rusia, informó el ministro de Salud, Mikhail Murashko, el miércoles.
Fuente: El Financiero