Cárteles mexicanos han logrado colocar sus ingresos en los sistemas estadounidenses por medio de la comunidad china que habita en el lugar, sobre todo, aquel efectivo proveniente de sus productos a granel. Los chinos que trabajan en esto se encargan de poner el dinero en el aparato financiero de los Estados Unidos y posteriormente lo transfieren a cuentas mexicanas por vía electrónica, indicó la Administración de Control de Drogas (DEA).
Un informe de esta administración reveló que las organizaciones asiáticas dedicadas a esta actividad se encuentran inmiscuidas en el tráfico de marihuana y MDMA, además de cocaína y metanfetamina. Según el informe, “el mercado negro mexicano de lavado de dinero, a través de redes de corredores de dinero y el uso de servicios de casas de cambio transfiere ingresos de los cárteles de droga a México por medio de negocios de divisas, compra de activos con dinero en efectivo y el uso de empresas fachada”, dice el informe de Evaluación.
Estas metodologías para lavar dinero terminan convirtiéndose en transferencias electrónicas convenientes para los narcotraficantes porque, debido a las distintas partes por donde pasa el dinero, logra ocultar la verdadera identidad de los beneficiarios.
Ante la identificación de una tendencia creciente de organizaciones asiáticas dedicadas al lavado de dinero, relacionadas con el negocio del tráfico de drogas, el gobierno de China estableció un límite en la transacción de divisas chinas a los Estados Unidos.
Un chino que resida en ese país podrá realizar al año transacciones por un máximo de 50,000 dólares. Las disposiciones en efectivo tendrán un máximo de 15,000 dólares anuales, esto complica la situación de la comunidad china debido al incremento constante en la demanda de dólares.
Debido a las necesidades de la comunidad, las organizaciones delictivas han encontrado en el lavado de dólares estadounidenses un nicho para revender dólares de ese país a ciudadanos chinos con el objetivo de obtener ganancias en moneda china.
Al llegar el dólar hasta los ciudadanos compradores el esquema circular, para terminar de “limpiar” el dinero, se cierra. De esta manera, los cárteles mexicanos han encontrado una forma modificada de realizar este tipo de actividades.
De acuerdo con la DEA, algunos de los miembros de los cárteles mexicanos supervisan estas actividades mientras radican directamente en aquel país. Entre los cárteles que han sido identificados se encuentra el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el de los Beltrán Leyva. El reporte asegura que “los operadores en cadena son consientes de su función específica, sin embargo, desconocen otros aspectos del cártel”.
Es decir, varias de las personas que se encuentran participando están contratadas de manera independiente y pueden trabajar en más de uno de los cárteles.
Fuente: Infobae