Una de los lugares más hermosos para aquellos amantes del arte, historia o religión es sin duda La Capilla Sixtina que esta ubicada en la pequeña Ciudad del Vaticano.
Además de poseer una arquitectura y pintura excepcional, este bello recinto también tiene sus secretos y misterios. En OPEN te decimos cuales son.
1. Su nombre
Anteriormente se le conocía como Capella Magna, pero se ordenó su restauración durante el pontificado del Papa Sixto IV por allá del año 1475. Desde ese momento se le llamó Capilla Sixtina, nombre que ha tenido hasta entonces.
2. La sede del Conclave
En este magnífico edificio es importante para la elección del nuevo Papa, pues aquí es donde se realiza el célebre Conclave que es la reunión secreta en la que se elige al máximo representante de la Iglesia Católica. Se celebra en la Capilla Sixtina desde 1870.
3. Arte atentado contra la moral
El Papa Pío IV quien tuvo su pontificado entre 1559 y 1565, consideraba que algunas obras de la regia capilla eran una “falta moral” por plasmar desnudos, así que encomendó la tragicómica tarea de cubrir las partes nobles de las pinturas al artista Daniele da Volterra – quien era amigo del propio Miguel Ángel – Por este encargo, lo apodaron como “Il Braghettone” algo así como “El pintacalzones”.
4. No sólo fue Miguel Ángel …
El primer artista en pintar el cielo de la imponente capilla fue el artista Piermatteo d’Amelia. Antes de que Pio IV ordenara su restauración, pintores como Pietro Perugino y Sandro Botticelli colaboraron para la decoración del templo.
5. Sus dimensiones no son casualidad
Las medidas de la Capilla Sixtina tienen un origen bíblico pues están inspiradas en el Templo de Salomón que es mencionado en el Antiguo Testamento, el cual presuntamente medía 40,9 x 12 metros. ¡ Sorprendente!
6. Las pinturas y sus misterios
Existen diversos significados que se le dan a las pinturas, esto no es algo nuevo pues hay que recordar que el arte es subjetivo y que la interpretación de una obra depende de muchas cosas como religión, edad, nivel sociocultural, región en la que se vive y un largo etcétera. Pues bien se cuenta que algunas de las pinturas “esconden” mensajes, símbolos o historias que sólo unos cuantos logran entender, un ejemplo de esto es la icónica obra de “La creación de Adán” se muestra a Dios señalado por una silueta parecida a la de un cerebro humano, se dice que esto fue añadido por Miguel Ángel como un guiño hacia toda la revolución cultural e intelectual por la cual atravesaba Europa: El Renacimiento, época donde las ciencias y las artes resurgieron de una forma espectacular.
Fuente: OPEN