EFE dio a conocer la Unión Europea (UE) activó este lunes su sistema de satélites Copérnico para seguir la erupción volcánica en la isla canaria de La Palma, y la Comisión Europea ya está en contacto con las autoridades españolas para ofrecer apoyo adicional, indicó la presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen.
"Estamos con todas las personas en las Islas Canarias ante la erupción del volcán en La Palma (...) Estamos en contacto con las autoridades españolas para proveer apoyo adicional de ser necesario", dijo en Twitter von der Leyen, que se encuentra en Nueva York para asistir a la asamblea general de la ONU.
Von der Leyen se comprometió a que la UE ayude a La Palma para paliar los efectos de la erupción volcánica que comenzó ayer, mediante la activación del mecanismo de protección civil europeo y con también con ayudas "a medio y largo plazo" para colaborar en la reconstrucción de las zonas dañadas.
Este último anuncio lo hizo la política alemana durante una intervención por videoconferencia durante la reunión de los dirigentes del grupo del Partido Popular Europeo (PPE) en el Parlamento Europeo que se está celebrando estos días en Roma, según un vídeo divulgado por la delegación española.
La Unión Europea ha activado a petición de protección civil el servicio de mapeo rápido de sus sistemas de satélites Copérnico y utilizará en concreto el satélite Sentinel 2 para tener controlada la zona, informó además la Comisión.
“Se trata de un proyecto europeo que nos sirve en el día a día para ver desde el espacio lo que se puede necesitar ante esta difícil situación”, destacó Von der Leyen en su intervención por videoconferencia en respuesta a una intervención del eurodiputado de La Palma Gabriel Mato.
La erupción comenzó el domingo a primera hora de la tarde en el municipio de El Paso y hasta ahora se han abierto nueve bocas por las que sale lava que avanza por las laderas en dirección al mar.
El fenómeno, que no se producía desde hace 50 años, ha obligado a desalojar a unas 5.000 personas de sus casas para evitar riesgos y, por el momento, no ha causado daños personales aunque sí destrozos materiales, ya que las lenguas de lava han arrasado a su paso viviendas y campos de cultivo.