Mientras que en Puebla 10 Centros de Reinserción Social (Ceresos) reportaron algún nivel de sobrepoblación de internos entre enero y agosto pasados, durante este año alcanzaron apenas la preliberación 21 internos que consiguieron finalizar sus condenas u obtener una salida condicionada.
El Cuarto Informe de Gobierno de Miguel Barbos Huerta reveló que en su último año de gobierno obtuvieron 17 libertades anticipadas, cuatro salidas condicionadas, junto con 20 personas que les redujeron su condena y dos más que acordaron sustitutivos penales. Al final, beneficiaron a 43 internos de cárceles poblanas.
Los Cuadernos Mensual de Información Estadística Penitenciaria Nacional Resumen de la Población Privada de la Libertad del Órgano Administrativo Desconcentrado Prevención y Readaptación Social detallaron que en Puebla tiene 10 cárceles con señales de sobrepoblación.
A nivel estatal, la cárcel más saturada es la de San Pedro Cholula, al tener en agosto pasado 538 internos, cuando su capacidad es de 159 personas, por lo que superó su límite con 379 sujetos, lo que arroja que está por encima de sus espacios más del 238 por ciento.
Otro de los Ceresos más saturados en la entidad es el de Zacatlán, tras reportar en agosto pasado que atendieron a 130 internos, pero su límite es de 66 personas, por lo que superó su límite en 64 sujetos que representan que rebasó sus capacidades casi en 97 por ciento.
También resalta la capital poblana con el Cereso de “San Miguel”, tras reportar que en su corte de agosto de este año se tuvieron a 4 mil 764 internos y su capacidad es para 2 mil 397 personas, por lo que superó su límite en 2 mil 367 sujetos que indican casi ser el 99 por ciento.
