Al menos tres municipios poblanos confirmaron que en sus panteones municipales estuvieron cerca de llegar a su capacidad máxima para albergar cadáveres en 2020, cuyos principales registros se reportaron en San Miguel Xoxtla, Tlaltenango y Domingo Arenas, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

La Recopilación de Información de los Cementerios Públicos en las Zonas Metropolitanas del país (RICPZMP) 2021 revela que en Puebla midieron la capacidad e infraestructura de los panteones de 19 municipios poblanos, en los que resalta que la mayoría de los muertos se mandaron a fosas.

Destaca que, en 2020, cuando se desarrolló el año de la pandemia por covid-19, San Miguel Xoxtla tuvo el panteón público más saturado de Puebla, al no tenerse lugares disponibles para fosas o tumbas, con sus 2 mil 450 lugares cubiertos; no obstante, conserva seis de las siete criptas familiares libres.

Otro de los panteones públicos con mayor ocupación es el de Tlaltenango, al reportar que en el 2020 concluyó con solo 15 de sus 55 fosas o tumbas disponibles, aunado a que es la única manera en que recibieron los cadáveres de su población, tras no tenerse indicadores en ningún otro tipo de servicio.

También Domingo Arenas tiene otro de los panteones públicos con mayor ocupación en Puebla, tras reportarse que tienen libres 40 de sus 400 fosas o tumbas, así como se convirtió en el único servicio que ofreció para el resguardo de restos en el municipio.

En caso contrario, la capital poblana se convirtió en el municipio con la infraestructura más grande, con 17 mil 825 de sus 133 mil 812 fosas o tumbas disponibles; otro de los municipios con más lugares fue en Ocoyucan, tras mantenerse sin ocuparse 14 mil 478 de sus 24 mil 863 espacios.