Medio Tiempo informa que durante su presentación oficial como jugador de Chivas, Oribe Peralta fue cuestionado si al vivir en la Ciudad de México hubo alguna situación de violencia que le orilló a salir de la capital del país.
Sorpresivamente, el delantero reveló que hubo una amenaza de secuestro a su esposa e hijos lo que también influyó para aceptar la oferta del Guadalajara e irse del América. “Hubo una situación personal que también me hizo moverme, fue muy fuerte la verdad, pero creo que a muchas personas les pasa esto, entonces no debemos permitirlo, debemos ser más racionales.
Fue una amenaza de secuestro hacia mi esposa y mis hijos, no por esa decisión… fue una de las causas que influyó que estuviera acá, pero no fue en su 100 por ciento”, explicó.
Peralta vivió cinco años en la capital del país, pues llegó al América para el Apertura 2014 luego de sus mejores años con Santos en Torrreón. En la conferencia de su presentación, Oribe estuvo acompañado por el CEO de Chivas, José Luis Higuera, y el entrenador Tomás Boy.
Ahí, Peralta mencionó que deportivamente su ciclo en América ya había terminado. Por su parte, Higuera se negó a revelar términos de la negociación tras la especulación de que Chivas no pagó por los derechos del delantero, aunque sí agradeció a Emilio Azcárraga, dueño del América y Televisa; Santiago Baños, presidente del club, y a Joaquín Balcarcel, recién llegado a la directiva azulcrema para labores operativas y administrativas.