ESPN informa que el hotel de concentración del Atlas se convirtió en la sede de una gran fiesta rojinegra la noche del miércoles, ya que se hicieron presentes sus seguidores para celebrar el tradicional ‘Banderazo Rojinegro’, previo a la final de ida en el Estadio Jalisco ante Pachuca.
Entre bombos, trapos, banderas y bengalas, la afición del Atlas mostró su apoyo de cara al primer episodio del choque por el título ante los Tuzos.
En contraste, Pachuca arribó a Guadalajara de manera discreta y sin el recibimiento de un solo aficionado en su hotel de concentración.
Al caer la noche, mientras en la afición rojinegra vivía un carnaval, el conjunto de Hidalgo disfutó de una noche en calma, en la capital de Jalisco.
La serenata rojinegra inició cerca de las 20:00 horas, cuando en la entrada principal del hotel de concentración acudieron al menos 1,500 aficionados.
En un ambiente muy familiar y diferente al resto de otras ediciones, seguidores de todas las edades enfundados en la casaca rojinegra, alentaron a sus ídolos previo a su segunda final consecutiva.
Después de algunos minutos de cánticos, comenzaron a salir los jugadores, siendo Julián Quiñones, Julio Furch, Aldo Rocha y Camilo Vargas los más esperados por la afición, luego de que comenzaron a corear su nombre.
El colombiano Quiñones fue uno de los futbolistas más ovacionados, después de sus destacadas actuaciones durante la actual Liguilla con los Zorros.
Posteriormente, ya con todo el plantel en la terraza del hotel, la directiva se hizo presente, encabezada por el presidente José Riestra.
Al final, con los populares cánticos del grupo de animación de Atlas, la afición cerró su serenata de cara a la final de ida, con la esperanza de la obtención del anhelado bicampeonato.