FOX Sports informa que acostumbrado a las gestas europeas y las remontadas impensables, el Real Madrid encara la vuelta de las semifinales de la Champions League ante el Manchester City en un nuevo escenario, desafiando a la historia que apunta a que en las ocho ocasiones que perdió en la ida de la eliminatoria que da acceso a la final, nunca logró el pase.
Buscará un nuevo logro el equipo de Carlo Ancelotti en la que es su trigésimo primera semifinal en la competición de mayor prestigio. Superó 16 de las treinta que disputó, pero fue eliminado siempre que perdió el partido de ida, como ocurrió en el Etihad Stadium en un choque de locura.
Con el 4-3 a favor del Manchester City, se igualó el récord de goles en un partido de semifinales en Champions League, hasta siete como ocurrió en el triunfo del Ajax ante el Bayern München (5-2 en la temporada 1994/95) y la goleada del Liverpool al Roma en Anfield (5-2 en la campaña 2017/18). El resultado, presenta un nuevo desafío que superar al Real Madrid.
La primera vez que le ocurrió se remonta a la campaña 1967/68, cuando el Manchester United, a la postre campeón, ganó en Old Trafford por 1-0 con gol de George Best y en la vuelta consiguió empatar a tres para acceder a la final de Wembley, en la que derrotó al Benfica. El Real Madrid llegó a tener un 2-0 y un 3-1, pero los goles en el tramo final de David Sadler y Bill Foulkes acabaron con las esperanzas del equipo que dirigía Miguel Muñoz (3-3).
Seis años después, el gran Ajax que capitaneaba Johan Cruyff camino de su tercer título seguido en la Copa de Europa pudo con el Real Madrid tras vencer en el Olímpico de Amsterdam por 2-1. Barry Hulshoff y Ruud Krol, con dos tantos en diez minutos en el segundo periodo, firmaron el triunfo ‘ajacied’. Aunque el posterior gol de José Martinez Pirri abrió la esperanza blanca. En la vuelta, el Ajax fue muy superior al cuadro de Miguel Muñoz y venció de nuevo por 0-1 con diana de Gerrie Muhren.
Las dos siguientes veces que el conjunto madridista cayó en semifinales tras perder la ida tuvo como verdugo al Bayern München. En la campaña 1986/87 sentenció con un 4-1 en el Olímpico gracias a un doblete de Lothar Matthäus y goles de Klaus Augenthaler y Ronald Wolfharth. Emilio Butragueño maquilló la derrota del cuadro del neerlandés Leo Beenhakker, que en la vuelta tan solo pudo vencer por 1-0 con diana de Carlos Santillana.
En la temporada 2000-01 el Bayern asaltó el Bernabéu (0-1) con un tanto de Giovane Elber y una magnífica actuación del meta Oliver Kahn. El cuadro de Ottmar Hitzfeld remató el pase a la final con un 2-1 en la capital bávara gracias a los goles del brasileño y de Jens Jeremies, que abortaron los intentos de los de Vicente del Bosque, tan solo reflejados en una diana del portugués Luis Figo para establecer el empate provisional.
El Barcelona de Pep Guardiola también salió airoso en la semifinal de la temporada 2010/11 ante el Real Madrid antes de proclamarse campeón contra el Manchester United en Wembley. En un partido de ida más que convulso, el conjunto de Jose Mourinho acusó una polémica expulsión de Pepe en una acción con Dani Alves. En superioridad, un doblete del argentino Leo Messi puso el 0-2 en el Bernabéu que encarriló la clasificación azulgrana.
Fue el encuentro que terminó con los famosos “¿por qué” del técnico luso en la sala de prensa. En la vuelta, Pedro Rodríguez aumentó la ventaja de los barcelonistas y el brasileño Marcelo selló el 1-1 definitivo.
Una campaña después, el Bayern München volvió a cruzarse en el camino del Real Madrid en la semifinal. En la capital bávara venció el conjunto alemán por 2-1 y en la vuelta un doblete de Cristiano Ronaldo y un tanto de Arjen Robben mandaron la confrontación a la prórroga y a los penaltis, en los que los errores del luso, Kaka y Sergio Ramos frustraron la pretensión madridista.
Otro conjunto germano frenó el paso del Real Madrid al año siguiente. El Borussia Dortmund de Jurgen Klopp. El polaco Robert Lewandowski, desatado, arrasó con un póker a los hombres de Jose Mourinho, a los que dio una mínima esperanzas un gol de Cristiano Ronaldo (4-1). Rozó la heroica, no obstante el equipo blanco. Dos tantos de Karim Benzema y Sergio Ramos en el tramo final le dejaron a uno de la clasificación, pero la remontada no llegó a la orilla.
La última vez que el Real Madrid cedió en una semifinal tras perder el partido de ida fue en el curso 2014/15 ante el Juventus, que venció en Turín por 2-1 y empató en el Bernabéu 1-1. Su exjugador Álvaro Morata fue el verdugo. Marcó en la ida y en la vuelta para liquidar a los que habían sido sus compañeros y acceder a la final de Berlín, en la que el equipo de Turín perdió frente al Barcelona.
De esta manera, el Real Madrid, el rey de Europa con sus trece conquistas, está obligado a derribar uno de los muros históricos con los que nunca ha podido. El dato positivo es que la única vez que se enfrentó al City en una semifinal, en la campaña 2015/16, logró el pase, aunque fue tras empatar a cero en Manchester y ganar 1-0 en el Bernabéu. Fue el comienzo de los tres títulos seguidos bajo la dirección de Zinedine Zidane.