ESPN informa que con una derrota ante Necaxa, por marcador de 1-0, fue como Querétaro regresó a la actividad después de vivir la semana más gris en su historia por los incidentes que vivió en el Estadio Corregidora entre las barras de Gallos y Atlas.

Los Rayos y queretanos tuvieron que vivir 90 minutos de futbol con gradas vacías, sin el apoyo de sus aficionados y solo el eco en los pasillos por los altavoces del estadio y los gritos de los jugadores en el terreno de juego.

Mientras que el futbol mexicano busca sanar una herida profunda que se vivió hace unos días, en el campo, Querétaro intentó cortar una racha de un año sin ganar en calidad de visita, mientras que los Rayos luchaban romper una racha de cuatro partidos sin victoria bajo las órdenes de Jaime Lozano.

El equipo local se puso arriba en el electrónico apenas al minuto 10 y en su segunda llegada al área rival, a través de un atrevido joven de solo 17 años, Heriberto Jurado.

En su partido 11 en Liga MX, Heriberto realizó una pared con Brian García, quien filtró la pelota al joven rojiblanco y teniendo frente a él a Jorge 'Burrito' Hernández, decidió rematar por debajo de las piernas del veterano centrocampista, lo que provocó que Washington Aguerre fuera sorprendido y no buscara atajar una pelota que se incrustó en el ángulo inferior derecho.

El equipo de Aguascalientes fue mejor con la ventaja en el marcador, tuvieron mayor calma para llegar a campo rival y fue a través de un tiro libre que Fabricio Formiliano tuvo la oportunidad de ampliar el marcador, al disparar con la parte externa de su botín, pero Aguerre se lanzó de buena forma y evitó un segundo daño en su arco.

Los de Gallos presionaron a la media hora de juego y estuvieron cerca de provocar un autogol en el rival con un balón largo al área de los Rayos. El rebote dentro del área obligó a Formiliano a buscar mandar la pelota a tiro de esquina, pero la redonda estuvo cerca de incrustarse en la red, pero al final terminó por estrellarse en el larguero .

El ambiente de paz que se buscó a lo largo de la semana se reflejó en el campo de juego, pues a lo largo del cotejo solo se vieron 17 faltas, ninguna entrada brusca y una sola tarjeta amarilla para Juan Batista Romagnoli.

Los Gallos fueron mejores en el desarrollo del partido y a pesar de intentar llegar a la portería de Luis Malagón, fueron incapaces de generar una jugada de peligro, pues Ángel Sepúlveda, Jefferson Montero y Ariel Nahuelpán fueron frenados en las bandas.

Todavía en los últimos minutos los Rayos tuvieron una última oportunidad, a través de un tiro de esquina que fue impactado por el propio Aguerre, pero la redonda se fue por arriba del esférico y con ello se esfumó la última oportunidad del equipo visitante.