Al igual que el beso blanco, esta tendencia sexual, que ha encontrado su popularidad en redes sociales, conocida como el beso arcoíris.
Se trata de una práctica que están ejecutando algunas parejas heterosexuales (irresponsables) para experimentar su vida sexual, sin embargo se trata de una prueba peligrosa que pone en riesgo la salud de quienes forman parte de ella.
El beso arcoíris comenzó a difundirse como una leyenda o mito a través de las redes sociales, mediante las cuales se ha explicado en qué consiste esta experiencia que se realiza entre parejas heterosexuales en la que ambos, al mismo tiempo, se dan sexo oral.
Esto sucede exclusivamente durante los días en que ella se encuentra en su período menstrual, por lo que una vez que él logre el orgasmo, tendrán que besarse apasionadamente para fusionar la sangre de ella y el semen de él.
En resumen, el beso arcoíris es una fusión e intercambio de semen, de sangre y de fluidos, de ahí por qué puede resultar muy peligroso e irresponsable efectuarlo.
¿Los peligros y riesgos del beso arcoíris?
Como lo comentamos anteriormente con el beso blanco, el hecho de intercambiar y tener contacto con fluidos, semen y sangre implica que las personas sean más propensas a adquirir cualquier tipo de enfermedad de transmisión sexual (ETS), por lo que el riesgo y probabilidad son sumamente altos, sobre todo cuando no existe ningún tipo de protección de por medio.
Algunos jóvenes han compartido en redes sociales que este mítico beso resulta ser un encuentro divertido, sin embargo, el hecho de realizar el beso arcoíris con desconocidos resulta imprudente e irresponsable en todos los sentidos. Por lo que nos cuestionamos si le hemos perdido el miedo a las enfermedades de transmisión sexual.
Se desconoce si realmente el beso arcoíris se trata de una experiencia que se lleve a cabo, de ser así los practicantes deben de ser más conscientes de lo que están haciendo, bajo la prioridad de estar informados y ejecutar sexo de manera segura.
Y es que pese a que el sexo implique cuestiones de tabúes, moral y más, el hecho es que es muy importante practicarlo con responsabilidad para no dañar a terceros.
Fuente: GQ