Bussines Insider informa que ahora hay más evidencia de que los millennials y la generación Z tienen menos sexo casual que las generaciones anteriores.
De acuerdo con un estudio del 1º de enero realizado por investigadores de la Universidad de Rutgers y la Universidad de Albany, los hombres y mujeres de entre 18 y 23 años tuvieron menos relaciones sexuales casuales (o sin una pareja a largo plazo) que los adultos jóvenes que formaron parte de la investigación 10 años antes.
Los investigadores analizaron los datos existentes sobre la dinámica familiar y los estilos de vida —recopilados entre 2007 y 2017— y examinaron específicamente las respuestas sobre la actividad sexual de 945 mujeres y 1,040 hombres.
Descubrieron que 38% de los adultos jóvenes estudiados tenían relaciones sexuales casuales en 2007, y ese número se redujo a 24% en 2017.
Después de examinar otros datos, los investigadores creen que la disminución del consumo de alcohol, la navegación en las redes sociales, el aumento en el tiempo destinado a los videojuegos y que los adultos jóvenes viven con sus padres durante periodos más largos llevaron a una caída de 14% en 10 años.
“Las cohortes recientes de jóvenes adoptan roles de adultos más adelante en sus vidas y dependen de sus padres durante períodos más largos”, dijo Lei Lei, coautor del estudio y profesor asistente de sociología en Rutgers, en un comunicado de prensa enviado por correo electrónico a Insider.
“La disminución de la participación en el sexo casual entre este grupo de edad podría ser otra señal de un retraso en la transición a la edad adulta”, explicó.
Los estadounidenses atraviesan una “recesión sexual”
Esta no es la primera vez que la investigación sugiere que el sexo —tanto casual como en pareja— está en declive en Estados Unidos.
En diciembre de 2018, la reportera de The Atlantic Kate Julian publicó una historia sobre el creciente “recesión sexual” provocada por la falta de sexo entre la generación millennial.
Los datos de la Encuesta Social General de 2019 reforzaron la idea de que el país se encuentra en medio de la más grande “Sequía Sexual Estadounidense”, informó The Washington Post.
Las tasas de celibato han aumentado constantemente durante las últimas tres décadas, pero en 2018 la proporción de personas que informaron no haber tenido relaciones sexuales durante todo el año anterior fue la más alta registrada.
Según los datos de la Encuesta Social General, casi uno de cada cuatro adultos estadounidenses informó no haber tenido relaciones sexuales durante el año pasado.
Parece que los millennials están impulsando la tendencia, y la Generación Z también forma parte de ella.
De 2008 a 2018, la proporción de estadounidenses de 18 a 29 años que informaron no tener relaciones sexuales se duplicó. Los jóvenes se casan más tarde en la vida (si es que lo hacen) y, como resultado, pueden tener menos relaciones sexuales.
“Hay más personas en sus veintitantos que no tienen una pareja”, dijo a The Post Jean Twenge, profesora de psicología en la Universidad Estatal de San Diego. “Entonces, bajo esas circunstancias, creo que habrá menos sexo”.
Las redes sociales distraen a los millennials del sexo
demás de las tendencias matrimoniales, los cambios en las normas culturales también pueden estar contribuyendo a la sequía sexual.
La mayor disponibilidad de entretenimiento en línea, incluidos los servicios streaming y las redes sociales, influye en la frecuencia con la que se practica el sexo, explica el artículo de Julian en The Atlantic .
Eso significa que incluso las parejas pueden optar por pasar su tiempo libre en Netflix o Instagram, en lugar de en la intimidad sexual.
Además, las mujeres han ganado más independencia en las últimas décadas y sienten que tienen una mayor capacidad para elegir a sus parejas. La tasa de mujeres heterosexuales casadas está rompió un récord mínimo, según datos del censo.
Aún así, estos nuevos datos sugieren que los jóvenes no son los únicos que se abstienen ampliamente de las relaciones sexuales. También plantea la cuestión de si menos sexo es necesariamente algo malo, especialmente si eso significa que las mujeres son más independientes y capaces de ejercer más control sobre sus cuerpos.