Uno de los primeros dilemas que se nos plantea cada vez que hay que acometer la decoración navideña de la casa es el lugar donde poner el árbol de Navidad. Todos los años me surge la misma pregunta: ¿dónde pongo el árbol de Navidad? Y no es que tenga muchas opciones, pero parece que no le encuentro la ubicación perfecta. Al final siempre termino colocándolo en el mismo sitio.
Si a ti te pasa lo mismo y tienes dudas sobre dónde poner el árbol, piensa que ha de estar en la habitación más importante de la casa, en aquella donde más tiempo se pasa, para que puedas disfrutarlo a tope.
Tendrás que buscar un espacio amplio (mueve los muebles de sitio si es necesario), para que luzca como se merece. Mejor no lo pongas en lugares de paso, ni cerca de puertas y ventanas donde puede entorpecer la circulación. Será un engorro y acabarás harta del arbolito.
Y tampoco lo pongas cerca de una estufa u otra fuente de calor, sobre todo si tienes un árbol natural, porque se estropeará enseguida. Una esquina de la habitación puede ser una buena opción.
Claves para decorar el árbol de Navidad
Cuando tengas más o menos claro el sitio donde vas a ponerlo, ya puedes empezar a decorarlo. Lo mejor es ir siguiendo un orden lógico, comenzando por montar el árbol, si este es artificial. Procura que la base del mismo sea sólida y estable, y ocúltala de alguna manera (los árboles artificiales no suelen tener una base muy decorativa). Un conjunto de paquetes de regalo, aunque estén vacíos, puede ser una buena idea.
En el caso de que te hayas decidido por un árbol natural, también tienes que asegurarte de que la base es estable, de forma que no pueda caerse si aún en el caso de que reciba un golpe (algo no tan raro, sobre todo, si tienes niños pequeños en casa). Busca una maceta de buen tamaño, pon piedras en el fondo y llénala de tierra hasta dos tercios de su capacidad. Después coloca el árbol en la maceta de forma que sus ramas más bajas toquen el borde, y llénala con tierra, presionando con fuerza. Riega un poco y ¡listo!
Las luces, un elemento que no puede faltar
Cuando ya tengas tu árbol listo, y montado en el caso de que sea artificial, habrá que comenzar a decorarlo. El primer paso será colocar las luces (pruébalas antes para ver que funcionan).
Lo mejor es comenzar a poner la tira luminosa desde la parte inferior, ascendiendo por las ramas y procurando que las bombillas queden bien repartidas. Si tu árbol es muy grande necesitarás más de una tira de luces. Cuando hayas terminado, enciéndelas para ver si has dejado algún hueco o si tienes que modificar algo.
El siguiente paso, los adornos
Esta parte es, seguramente, la más laboriosa, pero también la más divertida. Se trata de colgar en el árbol todos los adornos que lo van a decorar, desde bolas de Navidad hasta pequeñas figuras. Lo más normal es sacar los que tenemos del año pasado, aunque también podemos aprovechar para comprar algún adorno de Navidad nuevo, o para hacer algunos adornos caseros.
Ve colgando los adornos de forma uniforme por todas las ramas, procurando que los colores también queden bien repartidos. Reserva los adornos más especiales para ponerlos al final en las partes del árbol que más se ven: en el frente y la parte superior.
A continuación hay que poner las guirnaldas. Una bonita guirnalda consigue dar más luz si cabe al árbol de Navidad. Tendrás que comenzar a colocarla desde arriba e ir bajando poco a poco, rodeando el árbol hasta llegar a la parte inferior. Si es necesario coloca dos guirnaldas.
Una estrella en la punta
El colofón a la decoración del árbol lo pone ese detalle especial que se pone en la parte más alta, coronando la decoración, y que es el último detalle que se añade al árbol. A mí desde siempre me han encantado las estrellas para poner en la punta del árbol, pero puedes elegir cualquier otro motivo especial: una figura de Papá Noel, un angelito, etc. Lo importante es que sea especial y un poco más grande que el resto de adornos.
La mayoría de los árboles de Navidad artificiales llevan en la parte superior un hueco para insertar la figura de la punta, pero si tu árbol no lo lleva o se trata de un ejemplar natural, siempre puedes doblar una rama sobre sí misma para poder poner el adorno.
¿Y tú? ¿Te gusta poner el árbol en casa o prefieres otro tipo de decoraciones?
Fuente: Internet