Mark Chapman, el asesino más misterioso de la historia, estuvo cerca de la entrada del edificio en el que vivía John Lennon, hablando con otros fans y con el portero. Por la tarde, John y su esposa Yoko Ono salieron del edificio Dakota para una sesión en los Record Plant Studios. Mientras Lennon caminaba hacia la limusina, Chapman consiguió que el cantante le firmara un ejemplar de su último disco. Pero aunque cumpliera su aparente primer objetivo, permaneció esperando en la entrada hasta que la pareja volviera.
A su regreso, camino hacia la entrada del edificio, los enamorados pasaron de nuevo a un lado de Mark. Él llamó a John y al voltearse, el músico recibió cinco disparos sin previo aviso. Una de las balas le perforó la aorta, causando una gran pérdida de sangre, lo que le causó su muerte en menos de una hora. Chapman permaneció en la escena e impasible sacó su libro e intentó leerlo hasta que llegó la policía. En el libro escribió: «Ésta es mi declaración» y firmó como "El guardián entre el centeno".
«Me paso el día entero diciendo que estoy encantado de haber conocido a personas que me importan un comino. Pero supongo que si uno quiere seguir viviendo, tiene que decir tonterías de ésas». Ésta es una de las frases que escribió J. D. Salinger y que posiblemente encuadre el pensamiento de Chapman. Pero ¿quién es el guardián entre el centeno realmente?
Chapman se identificaba mucho con el protagonista de la novela, Holden Caulfield, quien odiaba a los hipócritas, creídos y cretinos que vivían en el mundo. Explicó que tuvo la necesidad de quitarle la vida a John Lennon después de escuchar el disco Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band, juzgando a Lennon como un hipócrita. Más tarde dijo que en aquel momento lo percibió equivocadamente.
Holden Caufield es un adolescente de 17 años de clase acomodada, hijo de un abogado, y tiene dos hermanos: una niña muy inteligente y un hermano mayor que es escritor en Hollywood. También tenía otro llamado Allie, quien murió de leucemia. No es un joven muy aplicado y además, casi nada le gusta. Es antisocial y brusco, aunque en el fondo tiene buen corazón. Cuando es expulsado del colegio Pencey, donde estudia, tres semanas antes de que terminen las clases, decide regresar a Nueva York y vagar por ahí para que sus padres no se enteren de su expulsión.
Durante más de 250 páginas se conoce su recorrido en soledad, donde vivirá diversas aventuras y accidentes. Por citar algunos ejemplos: se cita en un hotel con una prostituta que luego le roba el dinero junto con su padrote, regresa a su casa a escondidas para hablar con su hermana y sufre una pequeña tragedia, se aloja en casa de un profesor, de la que huye después que lo sorprende acariciándole la cabeza mientras duerme. Todo esto intercalado con las opiniones y recuerdos acerca de su familia y amigos, que algunas veces extraña y en otros momentos odia.
La novela se centra en las inquietudes del adolescente, el paso a la madurez, el conflicto interior en una personalidad difícil. Todos los temas principales de la obra giran en torno a un eje que sería la adolescencia. Por este motivo es extraño que una novela, podría decirse, tan sencilla y descontextualizada para un hombre maduro como Chapman, repercutiera tan duramente como para motivarlo a matar a John Lennon.
Si se quisiera relacionar a los involucrados con suma fuerza, se puede encontrar un puente entre Lennon, Chapman, Salinger y Holden. Los cuatro habían sido adolescentes sarcásticos, rebeldes, inconformes e inadaptados, comportándose de manera irreverente con los mayores, ya fueran sus padres, profesores o cualquier persona que tratara de imponerles algo. También los cuatro fueron expulsados del colegio, pero lo más importante es que a estos personajes el mundo les parecía poco, puesto que sus habitantes, desde su punto de vista, eran unos idiotas.
Los cuatro habían pasado por YMCA, la organización religiosa juvenil. Allí Marc David Chapman estuvo encargado de cuidar de los niños, un trabajo que ejercía a la perfección, incluso le pusieron Nemo de sobrenombre; la misma y única aspiración que manifestó también Holden Caulfield al final del relato, la de vigilar a unos niños mientras jugaban entre el centeno. En el YMCA un amigo le dio a leer a Chapman la novela de Salinger y el futuro asesino decidió ordenar su vida según la del protagonista.
Quizás este sea el pensamiento que retumbó en la cabeza de Mark Chapman y por el cual tendrá que permanecer en prisión hasta el final de su vida.
Nadie niega la demencia de Mark Chapman, pero tampoco Lennon era un hombre totalmente bueno. Conoce su lado más cruel y tirano.
Fuente: Alejandro Arroyo Cano/ Cultura Colectiva