Las flores en la casa pueden hacer que una habitación cobre vida casi de inmediato, pero mantenerlas frescas y lindas por más de un par de días parecería una tarea que sólo los profesionales pueden lograr.
Por eso, le preguntamos a Fernando de Jesús Segundo, diseñador florar y cabeza de Naturals Garden que nos diera sus tips de profesional para hacer que las flores que te regalaron con tanto cariño o compraste porque se veían tan lindas, te duren mucho más tiempo.
¿Cómo escoger las flores perfectas?
Si tú eres la encargada de comprar las flores, verifica el estado de las flores, sus pétalos y tallos. En el caso de las rosas, por ejemplo, los botones deben estar cerrados y no deben estar tallados o con signos de maltrato. De esta manera te estás asegurando que las flores están en buen estado, son frescas y por ende, que te durarán más tiempo.
No corras a ponerlas en un florero
Puede que sea lo primero que se te venga a la mente, pero no debes ponerlas en un florero en cuanto te las entregan. Antes que nada, debes asegurarte de que estén en perfecto estado y limpias.
Fernando recomienda que al sacarlas de su empaque, verifiques el estado del tallo y si está limpio o no. ¿A qué se refiere con esto? A que no tenga hojas en la parte baja y que no tenga espinas. También debes fijarte que las hojas sean completamente verdes y que el tallo esté firme.
Córtalas si quieres que duren más
Un tip que nos compartió Fernando fue cortar de forma sesgada la punta del tallo para permitir que los poros de la flor absorban de mejor manera el agua y siempre esté hidratada. Debes cortarlos entre 3 y 5 centímetros para que los resultados sean mejores.
Ya que estás en este paso, escoge el florero que vas a escoger para saber la altura a la que debes dejar las flores. Si es uno alto, deja los tallos largos y si es bajito, corta lo más que puedas las flores para que se vean armoniosas.
Limpia el agua
Esto podría ser la clave para que tus flores pasen de unos días a hasta tres semanas casi como nuevas. Fernando señala que lo más recomendable es cambiar el agua del florero cada dos días y siempre debe estar limpia.
No debes agregar hielo porque podrías quemar las flores; tampoco azúcar o ácido acetilsalicílico pues en vez de ayudarlas, sólo estás contaminando el agua limpia. Lo mejor es poner un chorrito de cloro para asegurarte que el agua está libre de bacterias que puedan acabar con tus flores pronto.
Mantenlas frescas
Procura que no les de el rayo del Sol directo, pues eso las daña. También procura que no estén expuestas a corrientes de aire muy intensas o muy frías. Verás que así, te durarán por mucho más tiempo.
Fuente: RSVP