En el mercado bursátil, existe un símbolo que, para todos aquellos que tenemos la oportunidad de participar en él,  representa la prosperidad, el optimismo y coraje del propio mercado, éste símbolo surge despúes del lunes negro de 1987, cuando la Bolsa de NY tuvo su segunda caída bursátil más fuerte de la historia.

El “Toro de Wall Street” o “Charging Bull”, es una de las atracciones turísticas más visitadas de NY, pero pocas personas conocen la historia, aquí yo se las cuento.

Era 19 de octubre de 1987, cuando el NYSE (New York Stock Exchange), es decir la Bolsa de Valores de Nueva York, representada por el índice Dow Jones caía 22.8% en solo un día. La caída en los precios de las acciones se dio por una acumulación de diversos factores, como el agotamiento del mercado, luego de que el Dow Jones había marcado un nuevo máximo histórico (2,700 puntos), el cambio de presidente en la Reserva Federal y la creciente especulación en el mercado accionario.

La escultura del “Toro de Wall Street”, fue creada después del lunes negro por un migrante que llegó a NY en los años 60´s. A partir de ese momento, se convirtió en un símbolo de coraje y fuerza para la ciudad con el mercado bursátil más grande del mundo.

Actualmente, es común escuchar entre los financieros, el término “bullish” para referirse a un  mercado alcista, se utiliza para describir situaciones financieras en las que el valor de un activo, índice bursátil o materia prima, cotiza al alza.

Fue así como durante 30 años,  el “Toro de Wall Street”  fue el único protagonista del mercado de valores, al igual que la clara mayoría de hombres que ocupan puestos directivos dentro del sector.

Pero en marzo de 2017, apareció frente al “Toro de Wall Street”, una niña que, con actitud desafianate, tiene el objetivo de recordarle al mundo que cuando se trata de ganarle al mercado, las mujeres, al igual que los hombres, podemos tomar decisiones asertivas, la llaman "La niña sin miedo", es una forma simbólica de presionar a las empresas para que haya más mujeres en las juntas directivas, busca alertar sobre las brechas de género en el mundo financiero.

Con base en los datos recopilados entre los 50 Bancos más grandes a nivel mundial, hasta el 2017, solo una de cada cuatro personas que alcanzan un puesto de directivo dentro del sector financiero, es mujer.

La estatua de “La niña sin miedo” fue financiada por la empresa de inversiones State Street, quien junto con otras mujeres, contribuyen al equilibrio del mercado de valores, tal es el caso de Stacey Cunningham, quien a partir de abril de 2018, es la presidenta de la Bolsa de NY, la primera  mujer al frente de esta institución y para la cual, más adelante dedicaré una publicación.