La fiebre mediática en torno a Shakira, Gerard Piqué y sus hijos desde la sonada separación de ambos finalmente le está pasando factura a la colombiana. La cantante hizo un llamado desesperado en sus redes sociales a los periodistas, medios y paparazzi que desde hace unos meses no hacen otra cosa que perseguir a sus hijos en busca de una foto o algún que otro suculento detalle.
Shakira dijo que, si bien es comprensible la curiosidad que despierta su vida y la de su familia, especialmente en medio de un escándalo que se extiende como chicle y parece no tener fin, sus hijos han tenido "un año muy difícil, sufriendo un incesante asedio y una persecución sin tregua".
La intérprete de 'Pies descalzos' llegó recientemente a Miami con el objetivo de retomar su vida antes de la década que pasó en Barcelona junto al padre de sus hijos, con quien hoy mantiene una guerra a toda voz.
Pero su llegada al sur de Florida ha despertado aún más interés en los niños –Milan y Sasha, de 8 y 10 años–, que no han dejado de acaparar titulares desde entonces: ¿en qué escuela estudiarán?, ¿qué hicieron antes de mudarse a Miami?, ¿dónde pasaron Semana Santa?, ¿qué actividades extracurriculares tienen?, ¿cuánto cuestan sus matrículas? y un largo etcétera.
"Ahora que inician una nueva etapa en sus vidas pido encarecidamente a los medios de comunicación en nombre de mis hijos que por favor respeten su derecho a la intimidad. Les ruego abstenerse de seguirlos hasta la salida o entrada del colegio, esperarlos en la puerta de nuestra casa, o perseguirlos hasta sus actividades extra-escolares y lúdicas tal y como ha sucedido cada día en Barcelona con el fin de obtener capturas fotográficas o mejores ratings", pidió Shakira.
Con información de Yahoo!