AutoCosmos informa que persecuciones en el cine hay muchas, prácticamente, toda película de acción cuenta con una. De ahí, parten, aquellas, buenas y memorables, que son recordadas por los fans, pero, en toda la historia de Hollywood, destaca, aquella protagonizada por Steve McQueen en la película Bullitt (1968), donde a bordo de un Mustang GT Fastback 390 verde da alcance a un Dodge Charger R/T 440 Magnum.
No importa, que en esa escena aparezca el mismo Vocho como 50 veces o que la edición no sea del todo buena, ya que es tan espectacular que resulta una delicia para cualquier amante de los autos y el cine. De hecho, bien podría considerarse como “la persecución suprema”. Tanto así, que Ford se ha visto en la necesidad de lanzar ediciones conmemorativas del Mustang que rinden homenaje a este icónico filme (si quieres conocerlas da click aquí).
La última reinterpretación fue lanzada en el Salón de Detroit 2018, donde enamoró a todos los asistentes al ser presentado por Molly McQueen, nieta de Steve McQueen y obviamente, los fans de este lado del río Bravo, ejercieron la presión necesaria para que, por vez primera, Ford se animase a comercializar el Mustang Bullitt en el mercado mexicano.
Estéticamente, este auto destaca de inmediato por el color verde clásico "Dark Highland Green", así como los nuevos rines de cinco radios de 19 pulgadas "Torque Thrust" de color negro con bordes cromados, además de una parrilla sin el logo del pony, mismo que en ciertos lugares específicos (como el centro del volante) fui sustituido por el logo “Bullitt”.
Aunque toma como punto de partida al Mustang GT, recibe algunas modificaciones mecánicas que ayudan a elevar la potencia del V8 de 5.0 Litros desde los 460 Hp, hasta los 480 caballos de fuerza. Este aumento de potencia, se obtiene gracias a un sistema de inducción proveniente del Shelby GT350 y nuevos cuerpos de aceleración. El torque, se mantiene en las mismas 420 libras-pie.
Sin duda, el perfil purista del Mustang Bullitt 2019 queda en evidencia, no solo por el ocho cilindros atmosférico, sino por la transmisión manual (con pomo de bolar de billar) exclusiva de seis velocidades. Con ello, y algunos otros trucos, la velocidad máxima se eleva a 262 km/h, ocho más que un “GT común”.
Solo 150 afortunados, podrán ser los dueños de esta edición de película, mismos que tendrán que desembolsar $915,000 pesos para llevarse a casa este auto lleno de adrenalina, purismo, pasión y cinematografía… ¡adiós aguinaldo!