El “vocho” es un coche de época, tanto así que en su apogeo era un hecho que tenías uno o conocías a alguien que lo poseía
Ese día una corriente eléctrica lo puso solo ante la noticia literaria más grave de su vida. Había ganado el Nobel y no tenía ante sí sino la azafata que le dio la noticia. Y un largo pasillo
Llevamos décadas fanteaseando con los coches voladores y de repente aterriza delante de nuestras narices
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