Diciembre llegó y el dinero extra en forma de aguinaldo cae a nuestra cartera o tarjeta de débito, sí, ese que a veces gustamos despilfarrar en regalos, salidas a comer o cualquier lujito que con nuestra quincena regular no nos damos, pero momento, antes de emocionarnos, recapacitemos.
El aguinaldo es una gratificación anual que las empresas deben pagar a sus empleados antes del 20 de diciembre, a algunos pueden llegarles a mediados de noviembre, cuando regularmente en las tiendas inician las ofertas de fin de año, lo que hace que sea más tentador gastarlo.
Sin embargo, antes de sucumbir a los ganchos comerciales o la mercadotecnia, pensemos que ese dinero extra, fruto del esfuerzo constante del día a día en la oficina, nos puede servir para gastos extras futuros o bien, para tener un pequeño “colchón” para iniciar bien el año.
Prestadero.com, la primera comunidad online de préstamos de persona a persona en México, nos da algunas recomendaciones para hacer buen uso del aguinaldo y evitar que se esfume antes de tiempo:
Invierte. Actualmente existen diversos mecanismos de inversión con excelentes rendimientos, así que esta temporada es una buena oportunidad para poner tu dinero a trabajar a través de algún producto de inversión o negocio; sin embargo, recuerda que si decides iniciar tu negocio, las estadísticas no están a tu favor pues sólo tres de cada diez negocios superan el año de vida.
Paga tus deudas. Si tienes créditos personales, automotrices, hipotecarios o tarjetas, puedes aprovechar tu aguinaldo para liquidarlos o hacer abonos a capital. Los abonos a capital te permiten reducir el monto de la deuda y tus pagos mensuales disminuyen, pero antes de hacerlo, consulta con tu institución si esto es posible, en ocasiones aceptan estos pagos anticipados o liquidaciones con una penalización.
Ahorra para tu retiro. Muy pocos mexicanos ahorran de forma voluntaria, adicional a su Afore. El problema es que los fondos de la Afore no serán suficientes para mantener una calidad de vida y probablemente necesitarán un empleo en lugar de disfrutar su vejez. Por eso se recomienda adquirir un plan adicional de retiro que te permita tener un mayor capital a tus 65 años.
Compra un seguro de gastos médicos. Una manera de proteger tus finanzas es con un seguro y uno de gastos médicos es lo mínimo que debes tener, pues te permitirá hacer frente al desembolso de un imprevisto como accidente o enfermedad. Verifica que el monto de la prima sea lo suficientemente alto para cubrir un siniestro. Existen seguros médicos cuyos pagos mensuales son muy pequeños pero el monto es muy poco, tan pequeño que en caso de accidente no te cubre ni una semana de hospitalización.
Haz reparaciones en el hogar. Reparar las fugas de agua o fallas eléctricas pueden representar un ahorro en el pago de tus servicios públicos. Cambiar la regadera por una eficiente o un sistema automático de iluminación te ayudará a consumir menos recursos.
Mantenimiento del auto. Las reparaciones del auto mejoran tu calidad de vida y te permiten ahorrar, por ejemplo: unos neumáticos en buen estado te podrían ahorrar hasta 10% de combustible. Lo mismo sucede con otras partes del coche, así que darle mantenimiento al auto con tu aguinaldo no es mala idea.
Fondo de ahorro. Finalmente puedes optar por no tocar ese dinero y mejor ahorrarlo para crear un fondo de emergencia que te permita cubrir las franquicias de tus seguros de auto y médico, o bien para un fondo de desempleo que te permita cubrir tus necesidades básicas por algunos meses.
Fuente: Forbes