Llevamos décadas fanteaseando con los coches voladores y de repente aterriza delante de nuestras narices. Sí, todavía es muy pronto para pensar en ciudades colapsadas de vehículos con alas y autopropulsores revoloteando alrededor de los rascacielos –gracias, Blade Runner–, pero lo que sí está cerca es que unos cuantos multimillonarios (pero muy multis) puedan cambiar su coche a modo vuelo en mitad de un trayecto.
La empresa que ha desarrollado el modelo de la foto se llama Terrafugia, pertenece a Volvo, y está a punto de lanzar al mercado una verdadera máquina de ciencia ficción. El automóvil, que parece sacado tal cual de un cómic futurista, podrá volar durante 640 km a una velocidad de 320 km por hora. No es tanto como un avión normal, pero sí que supera con creces a esos aburridos coches que van por la carretera. Y hay más ciencia ficción en su diseño: este coche eléctrico incluye un paracaídas de seguridad, de modo que si algo falla en las alturas, puedes salvarte como en una película de 007.
El coche volador de Terrafugia sale a la venta ya, en octubre de 2018. El precio oficial aún no se ha revelado, pero se calcula que estará entre el del Nissan Micra y el de un Boing 747. Además, más allá del precio, hay otro pequeño obstáculo: para utilizar el modo vuelo del coche se necesita una licencia de piloto, así como un aeropuerto para despegar y aterrizar. Para poder huir del atasco, que es el verdadero sueño de todo ser humano urbanita, habrá que esperar a modelos futuros y a que las leyes se vayan adaptando a esa tecnología de cine.
Fuente: esquire.com