Pepe Hanan
Muy complicada se torna la situación del equipo camotero para su permanencia en la entidad.
Entre dimes y diretes, desmentidos y aclaraciones, transcurrió la última semana como generalmente sucede cuando de una mudanza de un equipo profesional se trata.
Daremos una pequeña cronología de lo acontecido.
Emilio Maurer hace diez días pone la alerta de una posible venta y mudanza del equipo y argumenta que tomará cartas en el asunto desde el Congreso de Puebla para evitarlo.
Se mencionaba a la familia Toledo en Mazatlán, Sinaloa, como los compradores, ellos lo desmienten a través del dueño de Pericos, José Miguel Bejos.
El miércoles pasado me llega una información de una fuente muy importante donde me aseguran que el equipo Puebla está prácticamente vendido, lo doy a conocer en el programa radiofónico En Línea Deportiva y se desata la polémica al ser tomada la información por los medios de comunicación más importantes de la Angelópolis.
Empiezan las descalificaciones por parte de la directiva del Puebla. Asegura el Presidente ‘pirata’ Manuel Jiménez que el equipo no se vende.
Simultáneamente, el Gobernador Miguel Barbosa declara: ‘Somos rehenes de múltiples cosas, si el Puebla se va, ya habrá quien quiera jugar en el estadio Cuauhtémoc’.
Al mismo tiempo gira un oficio donde le ordena al Puebla desalojar el Estadio Ignacio Zaragoza en 24 horas (Ese inmueble lo utilizaban las fuerzas básicas del equipo). Se dice que tomó esa decisión, entre otras cosas, porque se enteró que los directivos camoteros lo utilizaban para hacer negocio al cobrarle a los jóvenes e incluso rentar la cancha cuando ese no era el objetivo de prestarles el estadio.
En Puebla nadie sabe nada y la versión que se maneja es que la información es falsa.
En la Ciudad de México, donde se encuentran los verdaderos dueños, se guarda silencio y piden abrir una investigación sobre quién filtró la información que tenían guardada.
El sábado, en el programa En Línea Deportiva, vuelven a surgir datos, se habla de que los Toledo no son los compradores y que existe otro grupo en Mazatlán que estaría teniendo un pre acuerdo con TV Azteca para la venta del equipo y que este movimiento estaría rondando los 35 millones de dólares, negociación en la que no estarían involucradas las cartas de Cavallini y Angulo, además, se dan datos duros sobre la situación del Estadio Cuauhtémoc, en donde el mismo tiene un problema serio con CFE que no se ha podido solucionar y se trabaja con planta de luz al no contar con los permisos correspondientes además de que el inmueble no cuenta con red hidráulica a la calle y se opera mediante la compra de pipas de agua.
Previo a ello, el viernes pasado en una comida a la que acudieron algunos jugadores del Puebla como Cavallini y el mismo ‘Rambocho’ Sosa, se comentó el tema, me platican que al director deportivo se le vio dubitativo y triste, que manejó la versión de que el equipo no se vende pero que a ciencia cierta no tiene la seguridad.
Son hoteleros, los del Corporativo Grupo ARHE.
Esta empresa es la verdadera interesada en comprar al Puebla para mudarlo a Mazatlán, Sinaloa, y se encuentran ubicados en la Calle Cerro de la Colorada #147 en la colonia Lomas de Mazatlán.
Es un conglomerado de empresas regionales y nacionales en 6 divisiones con sede en Mazatlán, Sinaloa.
Los propietarios son los hermanos Juan José y Erick Arellano Hernández y además de ser fuertes hoteleros con sociedades con Grupo Posadas, cuentan con diversos negocios como la renta de automóviles de la marca Álamo, gasolinerías y en lo deportivo destacan al ser propietarios de los Leones de Yucatán, de ahí que una de las primeras versiones afirmaban que el equipo iría a Mérida a jugar.
En resumen, es un grupo muy sólido que cuenta con el suficiente dinero para mantener un equipo de primera división.
Me platican que este grupo respalda al Gobernador de Sinaloa, Quirino Ordaz Coppel, quien, después de obtener los recursos para construir el estadio por medio de la operación de Fernando Galindo Favela quien es un experto de PRI en asuntos presupuestales, tiene la presión de contar con un equipo de 1ra. división para darle uso al estadio y fue precisamente este personaje quien le sugirió a este grupo empresarial la adquisición para lograr el objetivo, amén de que en el 2021 se vienen elecciones en ese estado de la República y el plan es generar una alegría en el electorado para seguir contando con su preferencia en las urnas, sobre todo después de lo ocurrido con el ‘Culiacanazo’.
Aquí en Puebla se nota a leguas que el equipo ha sido abandonado a su suerte con contrataciones realmente deplorables, la escuadra cada vez está peor y como lo veníamos comentando, las entradas cada vez son más pobres…
La fecha límite es el ya famoso mayo del 2020 que es cuando vence el contrato entre López Chargoy y TV Azteca.
¿Alguien en Puebla tendrá las agallas y el dinero para comprar al equipo y mantenerlo?
Se requieren al menos 40 millones de dólares para comprarlo y reforzarlo sin considerar una nómina y gastos superiores a los 20 millones de pesos mensuales.
Se dice que Emilio Maurer trabaja para conseguir a posibles empresarios inversionistas, lo que desconozco es si se trata de comprar a este Puebla o traer a otro equipo a la Angelópolis.
En las condiciones actuales del equipo sólo se ven dos sopas, o la venta o el descenso, pues no se ve, de acuerdo a la inversión actual, cómo podríamos tener otro destino.
Ojalá las cosas cambien y algo se pueda hacer para que Puebla siga contando con futbol del máximo circuito.
Es cuanto.
Nosotros como siempre veremos y diremos.
Hasta la próxima.
Twitter@pepehanan