Varios focos rojos deben prenderse ahora que se conozcan los oscuros antecedentes de Profesionales en Ingeniería y Sistemas (PROISI) S.A. de C.V., la empresa elegida por el Instituto Electoral del Estado (IEE) para realizar el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) de los comicios del próximo 7 de julio en Puebla.
Y es que PROISI –encabezada por Carlos Treviño Ramírez- arrastra una pésima fama y serias acusaciones que no se pueden pasar por alto, pues la salud del proceso electoral poblano podría estar en peligro.
En Veracruz, Oaxaca, Yucatán, Baja California y Tamaulipas, donde operó el PREP, a esta empresa no sólo se le señaló por incompetencia, sino también hay registro de que “se le cayó el sistema”, causando un daño irreparable a la legitimidad de las elecciones locales donde ha participado. Un pasaje que Puebla no puede permitirse este 2013.
Un documento del 7 de noviembre de 2011 es elocuente. Se trata de una carta enviada por Víctor Manuel Salas Rebolledo, representante general ante los órganos electorales del Comité Directivo Estatal del PAN de Veracruz, al representante del PAN ante el Consejo General del IEE de Sonora, Sergio César Zugich Encinas. En ella se expone con claridad lo sucedido con PROISI en los comicios locales de ese año en la entidad veracruzana.
A saber:
PROISI fue “enérgicamente” cuestionada y acusada de desestabilizar y opacar el proceso electoral por el PRD, PANAL, Partido Convergencia (hoy Movimiento Ciudadano) y el PAN.
La empresa, a través de su representante, Abel Treviño, tuvo incluso que ser citada en forma urgente a la sesión permanente del Consejo General del IEE debido a que “se les cayó el sistema” por más de 8 horas, presentando graves irregularidades que los propios candidatos a la gubernatura de dos partidos tacharon de “fraude electoral”.
PROISI argumentó que estaba siendo atacada por hackers, pero durante meses, la empresa aseguró que el sistema estaba seguro y se tenían respaldo para la transmisión segura de datos.
Peor todavía: el día de la jornada electoral se presentó una denuncia sobre la existencia de un domicilio en donde se instaló una “oficina de captura espejo”, donde se encontraban alterando los datos de la votación a través de la intervención del denominado “Kernel” o núcleo del sistema operativo.
Y en ningún momento se pudo consultar las actas del PREP digitalizadas, servicio al que la empresa se obligó en su contrato y que de haberse cumplido, hubiera constituido una herramienta para confrontar y entender la escasa información que los partidos en el IEE estaban recibiendo.
Esta otra carta, enviada esta el 8 de marzo de 2012 al presidente del Consejo General del IEE de Campeche, Jesús Antonio Sabido Góngora, por parte del mismísimo director ejecutivo del IEE de Veracruz, Luis Fernando Reyes Rocha, no deja lugar a dudas de los serios problemas causados por PROISI:
El IEE de Puebla pagará a PROISI S.A. de C.V. un monto de 16 millones 124 mil pesos para operar el PREP, es decir, para instalar alrededor de 160 centros de captura y transmisión de datos para anticipar los resultados de la jornada electoral de manera oportuna y confiable.
Y lo más curioso es que fue elegida pese a sus pésimos antecedentes no sólo en Veracruz, sino en prácticamente todos los estados donde ha prestado sus servicios.
¿Qué hay –y quién está- detrás de su contratación sin licitación de por medio?
¿Por qué, conociéndose su negro pasado, el pasado 12 de abril se le asignó el PREP poblano?
¿Qué va a pasar si el próximo 7 de julio se le “cae el sistema”?
¿Soportarán el consejero presidente, Armando Guerrero Ramírez, y el secretario ejecutivo del IEE. Miguel David Jiménez López, la crisis institucional, política y electoral que les explotaría en las manos?
¿Dónde quedaría el prestigio del árbitro de los comicios y la legitimidad de los candidatos ganadores, sobre todo ante un escenario de elección cerrada y un clima de controversia cada vez más acentuado?
¿En serio van a dejar que PROISI ponga en riesgo la elección de Puebla?