Arturo Luna Silva
Apenas ayer le comentaba aquí mismo que la ya famosa indefinición de Blanca Alcalá, en torno a su abierta participación en el proceso interno del PRI rumbo a Casa Puebla, empezaba a generar sus costos.
Costos que se comenzaban a reflejar entre sus mismos colaboradores, o gente de confianza, lo mismo en desgaste que en confusión y frustración por no saber cómo moverse, con quién jugársela y en qué momento.
Otro factor que le apuntaba era el de las deserciones. Le decía:
“La presidenta municipal de Puebla se sorprendería de la larga lista de “simpatizantes” suyos que, ante la ausencia de una señal, ante las dudas que generan las salidas en falso, se han ido a poner discretamente a las órdenes de Javier López Zavala, Enrique Doger o Jesús Morales” (sic).
Y bueno, ya salió del clóset el primero: ayer mismo se conoció que Fernando Ariza de la Fuente, secretario de Desarrollo Económico, Turismo y Competitividad Municipal, presentó su renuncia.
¿La razón?
Se incorporará al proyecto del “delfín” marinista Javier López Zavala.
En efecto: la indecisión de Alcalá arroja ya sus inevitables consecuencias.
Esta fue la nota que subimos a Puebla On Line a las 20:06 horas de este jueves 22 de octubre de 2009:
“El secretario de Desarrollo Económico, Turismo y Competitividad Municipal, Fernando Ariza de la Fuente, sí presentó su renuncia “con carácter de irrevocable” y, de hecho, será este domingo 26 de octubre el último día que funja como tal.
“Así lo confirmaron fuentes de primer nivel de la comuna, mismas que aceptaron que existe molestia en Blanca Alcalá Ruiz por la forma en que el funcionario presentó su dimisión, pues lo hizo mientras la presidenta municipal se encontraba fuera de Puebla, en concreto en el estado de Veracruz, a donde esta misma semana acudió para recibir un reconocimiento por sus políticas a favor del uso de la tecnología y los sistemas digitales dentro de su administración.
“Las fuentes dijeron al reportero que incluso la alcaldesa no le contesta el teléfono, pues ella tuvo que haber sido quien informase de los movimientos dentro de su gabinete y no que éstos trascendieran a través de filtraciones periodísticas.
“Y es que este jueves el periódico Cambio adelantó lo que ya se confirmó: que Ariza efectivamente presentó su renuncia ante el secretario general de la comuna, César Pérez, lo que sin embargo había sido negado hasta hace unas horas.
“Desde hace un mes (Ariza) había comentado con la presidenta su interés de dejar su cargo porque tenía intenciones de incorporarse a un proyecto político; sin embargo, todo quedó en stand by hasta antier que (Ariza) se adelantó a los hechos”, confiaron a Puebla On Line.
“Por su parte, colaboradores cercanos al secretario de Desarrollo Económico dijeron que la versión es correcta y que el proyecto político al cual se incorporará Fernando Ariza es el del secretario de Desarrollo Social del gobierno del estado, Javier López Zavala, quien aspira a la candidatura del PRI a Casa Puebla.
“Las fuentes municipales aseguraron que será en las próximas horas cuando se haga oficial la renuncia del funcionario al equipo de Blanca Alcalá”.
Hasta ahí la nota.
Demás está decir que si Blanca Alcalá no clarifica su futuro, en otras palabras: si no se decide ya sea a jugar la sucesión abiertamente o a bajarse completamente de la misma, las deserciones al estilo Ariza continuarán y continuarán ad infinitum.
A Alcalá sus colaboradores la quieren y respetan; le ven mucho, mucho potencial dentro de la carrera priísta a Casa Puebla, pero el amor no alcanza como para quedarse fuera de la jugada.
O lo que es lo mismo: fuera de la nómina.
Por eso muchos que estaban con ella hoy están con López Zavala o con cualquier otro de los aspirantes.
Es naturaleza humana.
No es personal: sólo son negocios.