El planteamiento de crear en Puebla nuevos municipios no solamente es viable, sino muy necesario para la eficiencia administrativa y de gobierno, pero si y sólo si va acompañada de una profunda reconfiguración que permita también eliminar algunas de las 217 demarcaciones actuales, cuyo exceso en número entorpece el flujo del ejercicio público en la entidad.
Poco nos hemos detenido a averiguar, pero Puebla es el segundo estado del país con más municipios.
Solamente está por debajo de Oaxaca, que tiene 570.
Eso es complicadísimo para la propia gobernabilidad estatal oaxaqueña, pero que ha sido así por las distintas comunidades y pueblos originarios, con sus usos y costumbres, que ahí conviven.
Estados con más habitantes tienen menos municipios: Veracruz (212), Jalisco (125) y Estado de México (125), por poner los tres siguientes ejemplos de la lista.
La semana que concluyó, el gobernador Miguel Barbosa Huerta planteó la posibilidad de que dos juntas auxiliares del municipio de Puebla, San Francisco Totimehuacán y San Miguel Canoa, pudieran convertirse en municipios.
Los requisitos, salvo una revisión a profundidad, pareciera que los cumplen estas juntas.
En principio, la demográfica.
La Ley Orgánica Municipal del estado de Puebla establece las condiciones.
Entre todas las que señala, hay dos elementales en los primeros apartados:
ARTÍCULO 13.- La creación de nuevos Municipios dentro de los límites de los existentes, requiere:
I.- Que la superficie en que se pretenda constituir el nuevo Municipio no sea menor de cien kilómetros cuadrados;
II.- Que haya un mínimo de veinticinco mil habitantes en esa superficie (…)
“Veinticinco mil habitantes”, dato muy relevante.
El tema demográfico termina por condicional al administrativo, porque los servicios se prestan a las personas.
Mientras más habitantes, es más complicado que un gobierno sea eficiente.
El aparato burocrático se engrosa.
El económico es vital.
En atención a esas consideraciones mínimas y lógicas, es entonces que no se explica cómo en Puebla hay tantos municipios.
Son muchísimos los 217.
Por supuesto, su existencia tiene que ver también con razones ancestrales, pero aquí estamos explicando las materiales y las jurídicas.
Por ello, con la creación de nuevas municipalidades habría que plantearse también la desaparición de algunas.
Su anexión a otros, como juntas auxiliares o hasta como inspectorías.
En un ejercicio hipotético, si hoy tuvieran que refrendar su condición de municipios los que existen en Puebla, en atención a las condiciones de la Ley Orgánica en la materia, apenas unos 45 lograrían reunir los requisitos.
Sí, alrededor de 45 del total de 217.
En principio, porque solamente 170 tienen un número habitantes cercano o superior a los 25 mil habitantes.
En cambio, hay un gran número de juntas auxiliares, de las más de 600 que tiene el estado, que tienen las condiciones para ser independientes.
Sin amarrar navajas, solamente citaré siete de los municipios -sin ninguna jerarquización- con menos de mil habitantes:
Axutla, con 976; Coatepec, 772, Santa Catarina Tlaltempan, 749; San Juan Atzompa, 975; San Martín Totoltepec, 692; San Miguel Ixitlán, 526; La Magdalena Tlatlauquitepec, 650.
Son las cifras del CENSO 2020 del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).
En muchas de esas municipalidades, del conteo de 2015 al CENSO de 2020 incluso disminuyó la población.
Es la naturaleza del fenómeno migrante, que se vive en Puebla.
No hay nuevos nacimientos, los migrantes no regresan y los que se quedan irán falleciendo.
Es muy importante la creación de nuevos municipios.
Tanto, como la reorganización completa de los 217 que hoy existen.
Los dos temas van de la mano.