Aunque no a todos se les puede meter en la misma bolsa, el tan cacareado Consejo Asesor Empresarial Capítulo Puebla del presidente Andrés Manuel López Obrador ha resultado un rotundo fracaso.
Con los meses ha quedado claro que aquel martes 5 de marzo de 2019, cuando sus 17 integrantes rindieron protesta ante Alfonso Romo, jefe de Oficina de la Presidencia de la República, fue solamente para la foto y la nota del día.
Se suponía que ese Consejo ayudaría a que llegaran a Puebla inversiones.
A generar y, sobre todo, aterrizar proyectos conjuntos, entre Iniciativa Privada poblana y el gobierno lopezobradorista.
Están en ese consejo Alfredo Rivera Espinosa (presidente), Carlos Real de la Mora y José Chedraui, vicepresidentes; Ángel Galván Muñoz, Luis Lozano Torres, Mauricio García Acevedo, José Antonio Cernicchiaro Arámburo, Alexis García Heres y Rodrigo Escudero Cárdenas, entre otros.
Ha pasado ya el diseño de dos ejercicios fiscales y nada de eso ha ocurrido.
En los proyectos de gran envergadura que el Gobierno de México planteó en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2020 no hubo ni uno solo para Puebla.
Para 2021, nuevamente quedó fuera la entidad.
Este lunes el presidente anunció ese gran plan de inversión, con participación de los sectores privado y público.
Son 39 proyectos en los que se aplicará una inversión desde los dos flancos, de 297 mil 344 millones de pesos.
Van a comunicaciones y transportes, energía y medio ambiente, principalmente.
Sobre todo, el plan carretero tocará a varios estados del país, pero no al nuestro.
En ese rubro se aplicarán 158 mil millones de pesos para la construcción de 20 obras.
Habrá libramientos, autopistas, tramos de conectividad y entronques, desde Chiapas a Nayarit, y de muchas en el norte, como la autopista Monterrey-Laredo de Pinfra, entre otras.
Pero el Consejo Asesor Empresarial Capítulo Puebla, que tanto presumió, entre otros, el empresario José Chedraui Budib, ex presidente local del PRI, ni una callecita le sacó a López Obrador.
Ni para adoquines en la capital, la que por cierto el iluso Pepe Chedraui pretende gobernar.
En una entrevista que publicó Contra Réplica y que realizó su director, Mario Alberto Mejía, el ex presidente del Comité Municipal capitalino del tricolor levantó abiertamente la mano y se puso a disposición de todos los partidos.
“José Chedraui Budib ya puso las cartas sobre la mesa y admite sin rubores que quiere ser candidato a la presidencia municipal de Puebla, y no precisamente por el PRI…
“Yo soy, antes de ser de cualquier color, un ciudadano poblano preocupado por Puebla… Durante muchos años he sido priísta. Pero puedo no serlo mañana, ¿eh? Te lo dejo muy claro”, blofeó el siempre titubeante Chedraui en la entrevista.
Si como vicepresidente del consejo de empresarios poblanos que tanta cercanía presume con el también empresario y jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, no ha sido capaz siquiera de conseguir una obrita para Puebla, ¿podría como alcalde?
Los presidentes municipales deben ser, vestidos de overol y echados para adelante, los primeros gestores de recursos para sus municipios.
Pero hoy, a Pepe Chedraui se le recuerda más por haber salido el helicóptero de Martha Érika Alonso y Rafael Moreno Valle del jardín de su casa, aquel fatídico 24 de diciembre de 2018.
Se supone que negociaba ese día una posición en el gobierno de Alonso, que ya no fue por su muerte.
No tenemos muchos en la memoria ningún recuerdo fresco de Chedraui como político o diputado local, que lo fue, por si se había olvidado.
Una cosa es querer…
Otra siquiera simular que se puede.