Un grupo de panistas de cepa, identificados con El Yunque, construye el escenario para que el rector de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), Luis Ernesto Derbez Bautista, sea el candidato del Partido Acción Nacional (PAN) en el proceso extraordinario a la gubernatura, y con la posibilidad de que el albiazul vaya en solitario. El ex aspirante presidencial, ex secretario de Economía y ex canciller en el sexenio de Vicente Fox se perfila así para ser ese “valiente”, que tanto le urge al panismo poblano, que enfrentará a la aplanadora lopezobradorista, que según las mediciones luce invencible si y sólo si no bebe del veneno del exceso de confianza y la ruptura interna.
El ex dirigente panista Juan Carlos Mondragón Quintana y el ex alcalde Eduardo Rivera Pérez lideran el impulso para Derbez.
Aunque Eduardo Rivera es la mejor carta panista en Puebla, en careos con los opositores, de acuerdo con la encuesta que realizó el diario El Universal, ya él ha dejado claro que en las condiciones actuales de su partido, no le interesa la postulación. No es ni pretende ser suicida. Ya perdió en 2018, no está condiciones ni políticas ni económicas ni familiares para una nueva derrota.
“Quiero ser gobernador, no solo candidato”, es la respuesta de Rivera, quien tiene, por cierto, el nivel de consultor superior en la UDLAP.
De ahí su cercanía con el rector Derbez, quien está la cabeza en opiniones positivas, con 42.3 por ciento, entre las opciones panistas y ante otros partidos.
A pesar de que el rector Derbez no representa la mayor posibilidad de triunfo frente a una alianza que encabece el Movimiento Regeneración Nacional (MORENA), en cambio es sí una opción decorosa y, muy importante, panista de origen.
La posibilidad de la candidatura del hombre que en abril próximo cumplirá 72 años comienza a tener adhesiones en el hoy casi demolido PAN.
Con él, los panistas pueden perder la elección, pero recuperarán su partido.
Panistas como Lalo Rivera que saben que el PAN la tiene muy cuesta arriba, pero que no quieren estar lejos del candidato del blanquiazul por si un milagro sucede en las urnas.
De ahí el impulso que él y otros están dando a un Derbez por demás entusiasmado con aparecer en la boleta de junio próximo.
EL TALÓN DE AQUILES DE MORENA
Entre todas las interpretaciones sobre la encuesta que también este miércoles dio a conocer la empresa Indicadores, de Elías Aguilar, no hay que perder de vista el mensaje que los números y las ecuaciones envían a MORENA: no puede confiarse.
En este análisis también el partido lopezobradorista y sus aliados se ven con una amplia ventaja, pero hay datos que debieran leerse con cuidado.
Sí importa el candidato de MORENA.
No con cualquiera gana.
O no proporciona las mismas posibilidades.
Algunos sectores del lopezobradorismo han dicho que cualquiera obtendría el triunfo.
Muy parecido a cuando en 2010, en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) se decía lo mismo.
Javier López Zavala, hay que recordarlo, sin embargo perdió y por amplio margen.
La afirmación es falsa, como nos enseña ese caso.
Cuenta y mucho, quién es el más competitivo.
Otro elemento que genera confianza, hasta exceso de ésta en los morenistas, es la aceptación tan alta que tiene el presidente Andrés Manuel López Obrador en Puebla, con 7.4 de calificación en promedio.
Presumen que ganarían de calle por eso.
También es falso y simplista ese supuesto.
López Obrador no estará, a diferencia del pasado 1 de julio, en las boletas.
Está el antecedente de Querétaro, en donde el gobernador saliente en 2015, el priísta José Calzada Rovirosa, fue el más aprobado de la historia de esa entidad, con 70 por ciento.
Pero el candidato de la amplia alianza que encabezó el PRI, Roberto Loyola Vera, perdió por 7.26 puntos.
El reto de MORENA es, además de conservar la unidad, elegir un buen candidato.
En el estudio se muestra a Luis Miguel Barbosa Huerta como el más conocido, pero a Alejandro Armenta Mier como el más competitivo.
No se puede soslayar que en las mediciones, en el apartado de careos, la preferencia por el partido es momentánea.
Y finalmente ésta depende del candidato.
Se mueve dependiendo de quién será.
La confianza es cianuro.
AGUAS TURBULENTAS
Tendré el gusto el próximo miércoles 13 de febrero, de moderar la mesa de comentarios al libro Estrategias de Campaña Sobre Aguas Turbulentas, del consultor Javier Sánchez Galicia.
En La Tocinería, en el Centro Histórico (2 Sur 904), a las 19:00 horas, acudirán como comentaristas, en lo que tendrá seguramente destellos de debate, tres políticos que han sido mencionados como posibles candidatos de sus partidos en la elección extraordinaria.
El senador Alejandro Armenta Mier, de MORENA.
Enrique Doger Guerrero, por el PRI y quien ya fue abanderado en la contienda constitucional de 2018.
Y Humberto El Tigre Aguilar Coronado, por Acción Nacional.
Sobra decir que, además del interés por la calidad del contenido del libro, de la pluma de Sánchez Galicia, conocedor a profundidad del tema, la expectación política estará presente por la presencia de estos tres personajes.
Que se vaya calentando la arena.