Una banda de secuestradores, que estaría también ligada al robo de combustibles, logró que dos de sus integrantes que internados en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Tepeaca, salieran escoltados por la subdirectora del penal, quien los intercambió por el director de la cárcel y su hijo, secuestrados previamente por cómplices de los reos, reporta LA JORNADA.
La fuga ocurrió la tarde del pasado lunes, aunque la noticia fue confirmada este martes por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), la cual no abundó en detalles sobre la evasión y se limitó a informar que se montó una operación para recapturar a los secuestradores.
No obstante, fuentes de la Procuraduría General de la República (PGR) revelaron que los fugados son Juan Carlos González Flores y Jaime Andrade Sánchez, quienes purgaban una sentencia por secuestro. Al parecer son oriundos de Palmar de Bravo, uno de los municipios donde operan bandas que se dedican al hurto de energéticos en ductos de Petróleos Mexicanos.
La tarde del pasado 23 de octubre, la subdirectora del Cereso de Tepeaca, Míriam Martínez, recibió una llamada desde el teléfono celular del director, Gerardo Cuevas Rojas, quien le informó que estaba secuestrado con su hijo por un grupo de hombres.
Trascendió que a Martínez le enviaron fotos y videos que confirmaban la versión de Cuevas Rojas y luego un hombre tomó el teléfono y le dijo que si no liberaba a Juan Carlos González Flores y Jaime Andrade Sánchez, el director y su hijo serían torturados y luego asesinados.
A lo anterior, la subdirectora ordenó a los custodios retirarse del área donde estaban los dos reos, a quienes se les proporcionó vestimenta civil y fue Míriam Martínez quien los escoltó hasta la salida del penal, donde lograron la huida.
Los secuestradores liberaron al director y a su hijo. Todos los funcionarios involucrados en la evasión están sometidos a investigación.
Fuente: LAJORNADA