Las cuatro iniciativas para una ley de seguridad interior, atorada en el Congreso por falta de consensos, “tienen más similitudes que diferencias”, y en capítulos como el uso legítimo de la fuerza, presentan planteamientos complementarios, de acuerdo con un estudio del Instituto Belisario Domínguez del Senado.
En diciembre pasado, el secretario de la Defensa Nacional (Sedena), Salvador Cienfuegos Zepeda, declaró que el Ejército pide regresar a los cuarteles, pues los militares no estudiaron para perseguir delincuentes.
A ello, en el Congreso se expresaron voces a favor de legislar, incluso en periodo extraordinario la ley de seguridad interior, de la que había iniciativas presentadas en ambas cámaras en 2015 y 2016. Y en enero pasado de presentó una más. Los coordinadores parlamentarios acordaron que San Lázaro fuera cámara de origen del tema que, sin embargo, no transitó y la violencia en Palmarito, donde murieron cuatro militares y seis civiles, reanimó la discusión en torno de esta legislación.
El estudio que analiza sendos proyectos de los senadores Roberto Gil (PAN) y Miguel Barbosa (PT), así como de los diputados Jorge Ramos (PAN) y César Camacho (PRI), expone que “la ley de seguridad interior se enriquece con el contenido de las cuatro iniciativas” y, desde luego, el que transite en los plenos de ambas cámaras depende “de la pluralidad de voces en el Congreso”, y subraya la oportunidad de que en el proceso legislativo se tomen “las opiniones de expertos en la materia”.
Las iniciativas incluyen disposiciones referentes al respeto de los derechos humanos y de las garantías individuales, “tema que [en la discusión abierta] es prioritario en la actuación de la regulación de las Fuerzas Armadas”.
Da cuenta de que todas las propuestas pretenden determinar los casos específicos en los que las Fuerzas Armadas pueden intervenir; establecen características de temporalidad o vigencia, la delimitación geográfica de las operaciones, el tema de los derechos humanos y sus garantías.
Las iniciativas tienden a completamente entre sí, y cita él caso de las propuestas en lo que se refiere al uso legítimo de la fuerza.