Tras el anuncio de Lydia Cacho a Vanity Fair de que su libro Los demonios del edén sería llevado al cine bajo la producción de los ganadores del Oscar, Alfonso Cuarón y Guillermo del Toro, Edith Encalada Cetina, una de las víctimas de pederastia y en cuya historia está basada principalmente dicho texto, consideró lo anterior como una atrocidad hacia su persona por pretenderse exhibir, una vez más, su historia de vida sin su autorización.

El best seller publicado en el 2004 narra la red de pornografía y prostitución infantil que existía en Quintana Roo liderada por Jean Succar Kuri e importantes figuras de la política mexicana.

En exclusiva para La Jornada Maya, Edith Encalada Cetina adelantó que tomará medidas cautelares con organismos internacionales para evitar que dicha historia sea llevada a la pantalla grande, al considerar que el texto de Cacho le ha causado un daño moral irreparable.

Acusó a la periodista de violar su privacidad y derechos como víctima, pues el libro se basa en su información personal, como denuncias, testimonios y exámenes sicológicos que le realizaron en la fundación de Cacho, información que debería ser confidencial al tratarse de una víctima de abuso sexual.

Aclaró que hasta el momento no ha tenido un acercamiento con Cacho ni mucho menos con los cineastas Cuarón y Del Toro.

“Es sabido públicamente, que en ese libro se narra parte de mi vida como víctima de pederastia cuando tenía 13 años de parte de Succar Kuri”, dijo Encalada Cetina. “Se exhiben fotografías de mi infancia y lo más lamentable, se menciona mi nombre”.

Dijo no estar de acuerdo en que Lydia Cacho siga lucrando con su historia personal a pesar de que en años anteriores demandó a la periodista por daño moral, aunque la demanda no procedió porque se le concedió un amparo. Acusó a Cacho de revictimizarla.

Edith Encalada considera a Cacho como su segundo verdugo -después de Succar Kuri- ya que ha generado ganancias con su historia de vida por más de 10 años, causándole daño moral y violentando su privacidad.

Edith Encalada recordó que conoció a la periodista a través de la asociación Centro Integral de Atención a la Mujer (CIAM) que Cacho presidía en Cancún y donde supuestamente recibiría apoyo y protección pero fue todo lo contrario, señaló.

“No saben el daño moral que me ha hecho y la terrible afectación hacia mi persona e integrantes de mi familia”, externó.

PLEITO LEGAL CACHO-ENCALADA

Como se recordará, tras la publicación de Los demonios del edén, Edith Encalada presentó una demanda por daño moral en contra de Cacho y la editorial Random House, argumentando que el libro había afectado su reputación y derecho a la privacidad.

Apelando al artículo 1916 del Código Civil del Distrito Federal, Encalada Cetina solicitó el pago de hasta 40 por ciento de las regalías generadas por la venta del libro, calculadas en ese entonces por sus abogados en 8 millones de pesos, y suprimir las referencias a su persona en ediciones subsecuentes para evitar mayores afectaciones.

La juez 17 de lo Civil del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, en primera instancia, desestimó la mayor parte de la demanda contra Lydia Cacho y la editorial, pero consideró que la periodista sí había violado el derecho a la privacidad de la denunciante en el caso Succar Kuri al no solicitar el consentimiento de Edith Encalada para la publicación de las fotografías en las que aparece.

Por ello, condenó a Lydia Cacho y a la editorial al pago de 300 mil pesos por cada una de las fotografías, por concepto de reparación del daño y además omitir las imágenes que provocaron la inconformidad de la denunciante.

Inconformes con la sentencia, ambas partes presentaron un recurso de apelación que fue resuelto por la Cuarta Sala Civil del tribunal capitalino, cuya sentencia revirtió la mayor parte de los logros que habían logrado Lydia Cacho y Random House Mondadori.

El fallo del 27 de enero del 2010 consideró que la publicación de testimonios, datos personales y fotografías de Edith Encalada sin su consentimiento expreso en Los demonios del edén se realizó de manera ilícita, además de que resultó perjudicial para la joven en su calidad de demandante.

Por ello, la Cuarta Sala Civil del Tribunal de Justicia del Distrito Federal (ahora Ciudad de México) ratificó la condena que obligaba a la periodista y a la editorial al pago de 600 mil pesos de manera conjunta por concepto de daño moral.

A esa cantidad, el nuevo fallo sumó un pago adicional superior a los 40 mil pesos por concepto de violación a su honor y vida privada, además de ordenar la modificación del libro para que este no incluyera fotografías de Edith Encalada ni el capítulo denominado Rompiendo el silencio en futuras ediciones.

Contra esta nueva sentencia, ambas partes volvieron a inconformarse y presentaron por separado sendos juicios de amparo directo ante el Décimo Segundo Tribunal Colegiado en Materia Civil del Distrito Federal, órgano jurisdiccional que solicitó al Máximo Tribunal del país que ejerciera su facultad de atracción.

Finalmente, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ejerció su facultad de atracción en noviembre del 2011 y en 2013 concedió el amparo a Lydia Cacho, sobreseyendo en definitiva la impugnación promovida por Edith Encalada Cetina dentro del mismo expediente.

AL CINE

Edith Encalada insiste en que llevar su historia de vida al cine sería una atrocidad e incluso reconoció que la noticia publicada ya en diversos medios de comunicación nacionales e internacionales le ha generado tristeza.

En el transcurso de la semana, trascendió a nivel nacional que en entrevista para Vanity Fair, Lydia Cacho reveló que será Cuarón y Del Toro los productores mientras que la directora será Patricia Riggen.

Asimismo, informó que el casting ya estaba listo y se decidiría quien asumiría su papel.

Respecto a los ganadores del Oscar, Guillermo del Toro y Alfonso Cuarón, no ha existido ningún pronunciamiento público sobre dicho filme pero Edith Encalada lamenta que vayan a producir una historia basada de un libro que ha estado en demanda por daño moral.

Finalmente, dijo que ya analiza las estrategias legales a seguir en caso de que se estrene dicha historia en los cines del país y a nivel internacional.

Fuente: La Jornada Maya