Con 73 votos a favor, 22 en contra y 4 abstenciones, el Senado aprobó la ratificación del Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (TPP-11) sin cambios y sin cartas paralelas, como pidieron los industriales del ramo textil y del calzado, al destacar las comisiones de Relaciones Exteriores y Comercio que no se cedió nada contra los intereses de México, "como no vamos a ceder en NAFTA, pese a las presiones que quieren ponernos".
Durante más de cuatro horas, la oposición criticó la prisa para discutir y aprobar un instrumento comercial de esta relevancia, al hacer notar que pasa después de solo 21 días de haber sido remitido por el Ejecutivo y pese a los miles de empleos que se perderán en industrias sensibles, como el calzado y los textiles, energética y otras.
El TPP-11 entrará en vigor 60 días después de que al menos seis de los países integrantes notifiquen por escrito la ratificación del tratado a Nueva Zelanda, país depositario del acuerdo comercial.
En defensa del tratado, el presidente de la Comisión de Comercio, Héctor Larios, dijo que por primera vez en una negociación comercial, se crea un grupo de seguimiento para que el actual gobierno y el entrante sigan negociaciones con Malasia y Vietnam para establecer mecanismos específicos de protección a las industrias que puedan verse afectadas.
A su vez, entrevistado en el Senado, el subsecretario de Economía, Juan Carlos Baker, dijo que las cartas paralelas negociadas hasta ahora son suficientes.
"Hemos negociado varias y estamos siempre en disposición de continuar trabajando en una agenda con el sector textil y del calzado, como lo hemos hecho previamente. Esto es algo que nos puede ayudar mucho a la diversificación comercial", argumentó.
En el debate, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Téófilo Torres Corzo, recordó que el acuerdo incluye a Australia, Brunei Darussalam, Chile, Canadá, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam y su contenido incorpora el contenido del TPP original, "cuyo texto no sufrió cambio alguno, con la salvedad de que 22 de sus disposiciones quedaron suspendidas".
El panista Larios Córdova agregó que esas 22 disposiciones se suspendieron porque Estados Unidos las incluyó en su beneficio, pero cuando Donald Trump sacó a su país de esta negociación, los demás socios resolvieron suspenderlas para cuando otra nación o los mismos norteamericanos decidan incorporarse más adelante.
De acuerdo al legislador, la discusión del TPP original tenía el objetivo de construir una negociación con Estados Unidos, para que las reglas que no existían hace veintitantos años que se negoció el TLCAN en materia de comercio electrónico, facilitación aduanera, Pymes, factores laborales, el tema energético, etcétera, se actualizaran.
"Lo que no cedimos en el TPP no lo vamos a ceder en Nafta, a pesar de la presión que quiera meternos. El acuerdo que los tres países construimos con otros nueve, ese acuerdo queremos sostenerlo en el Nafta y lo vamos a sostener; no estamos dispuestos a ceder nada en contra de los intereses de nuestro país".
Informó que como el TPP no se puede modificar, se incluyó un apartado en las "Consideraciones" donde el Senado pide al gobierno actual y al entrante mantener el Grupo de Seguimiento, para seguir negociando con Malasia y Vietnam.
"De manera absolutamente innovadora el acuerdo incluye algunas resoluciones: primero, una serie de conclusiones sobre estas dos industrias que se refieren a la creación de un grupo de trabajo, que ya existe, en donde participa la PGR, Hacienda, el SAT, la Secretaría de Economía y algunos senadores acompañan esta reunión junto con la industria textil y de calzado –que entiendo que esta misma semana se vuelve a reunir--para ver los temas de agenda interna, de la competencia desleal que tienen con el contrabando técnico, de la enorme competencia desleal que tienen con aquellos que evaden el fisco a través de empresas fantasma y que compiten con precios que están por debajo del mercado, porque su negocio es evadir al fisco, su negocio robarse impuestos no importa que le den en la torre a las industrias del país", explicó Larios.
Los senadores Dolores Padierna, Mario Delgado, Alejandro Encinas, Manuel Bartlett, entre otros, advirtieron de riesgos no solo para los empleos, sino para el sector energético porque se viola la Constitución en materia de contrataciones de proveeduría, los contratistas no tendrían que comprar productos de origen nacional, entre otras irregularidades.
"Este acuerdo se construyó de espaldas a la nación ¡y más adelante se los vamos a cobrar!", amenazó Padierna.
A su vez, los panistas Fernando Torres Graciano, Jorge Luis Preciado, Mariana Gómez, entre otros, lamentaron que la legislación no permita modificar los tratados, sobre todo cuando están en riesgo miles de trabajos.
Torres Graciano alertó que Guanajuato concentra el 68.5 por ciento de la producción total del calzado del país y el 76.5 por ciento de la producción de curtido y acabado, que generan 67 mil empleos; además la industria textil genera alrededor de 31 mil.
"Prácticamente estamos hablando de 100 mil empleos que estas dos industrias generan", lamentó Torres.
Fuente: MILENIO