Josele Márquez Balderas “El Chichi” y Manuel Escalona Barradas “El Cachorro”, integrantes de la organización “Los Zetas” en la región montañosa de Veracruz y quienes se encontraban recluidos en el penal de mediana seguridad de “La Toma en Amatlán de los Reyes” fueron los artífices del motín del sábado pasado por la noche en donde seis policías, un custodio y un reo perdieron la vida.
“El Chichi” y “El Cachorro” se inconformaron en el Centro de Readaptación Social al enterarse que serían trasladados a un penal de máxima seguridad, pues desde Amatlán de los Reyes, seguían al frente de actividades ilícitas como secuestro, homicidios, extorsiones y robo de combustible, informó el Grupo de Coordinación de Veracruz.
Hoy por la mañana se confirmó el deceso del reo, Luis Rogelio Hernández Flores, el cual se suma al fallecimiento por asfixia y heridas con instrumentos de carpintería, de seis policías y un custodio.
Aunado a ello, hay otros seis reos con lesiones, uno de ellos de gravedad y 15 policías con distintas lesiones.
A decir del gobernador Miguel Ángel Yunes Linares la peligrosidad de cuatro reos “muy violentos” obligó al gobierno a tomar la decisión de cambiarlos de penal.
“Estos individuos forman parte de bandas de delincuentes organizados y están vinculados a homicidios, secuestros y otros delitos graves, su permanecía en el penal de Amatlán, facilitaba sus actividades en contra de la sociedad”, dijo.
La Fiscalía General del Estado (FGE) ya realizó dictámenes periciales que determinaron que la muerte de los policías y el custodio fue provocada por asfixia por confinamiento.
Ayer, se filtraron conversaciones telefónicas a medios y redes en las que “El Cachorro” y “El Chichi” acusaban amenazas de muerte por parte de miembros de la policía, por lo que se entregarían a las autoridades. El gobierno de Yunes Linares rechazó tajantemente esta versión.
Hoy al mediodía, autoridades estatales y municipales rindieron homenaje a los policías que murieron en el penal de Amatlán de los Reyes.
Fuente: PROCESO