Agentes de inmigración entregaron esta semana avisos de inspección a 77 negocios, incluidos restaurantes, en el norte de California, donde trabajan miles de poblanos sin papeles.
El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE por sus siglas en inglés) repartió los avisos de lunes a miércoles a diversos establecimientos en Sacramento, San José y San Francisco.
En los avisos de inspección se solicita a los propietarios de los establecimientos que presenten los llamados formatos I-9 que los empleados deben llenar cuando se contratan por primera vez a fin de confirmar que cuentan con permiso de trabajo.
La nueva medida tiene lugar dos semanas después de que el fiscal general de California, Xavier Becerra, advirtió a los dueños de negocios que enfrentan multas de hasta 10 mil dólares si violan la ley estatal que les prohíbe entregar expedientes de los trabajadores a las autoridades federales de inmigración.
Por otra parte, el ICE oficializó una política para enviar agentes de deportación a las cortes federales, estatales y locales a fin de arrestar a inmigrantes que estén siendo procesados.
En un documento de dos páginas, la agencia indicó que ingresará a los juzgados únicamente para detener objetivos específicos: criminales condenados, miembros de pandillas, amenazas a la seguridad pública e inmigrantes que fueron deportados previamente o que tienen orden de deportación.
La familia, los amigos y los testigos no estarán sujetos a medidas civiles de inmigración, salvo en circunstancias especiales, como en la que el individuo represente una amenaza para la seguridad pública o interfiera con las acciones de cumplimiento de ICE.